Título: Donde termina el arco iris
Autor/a: Cecelia Ahern
Editorial: Zeta
Idioma: Español
Número de páginas: 432
Saga: —
Rosie Dunne y Alex Stewart, amigos desde la infancia, siguen siendo inseparables a través de los años. Necesitan compartir tanto los momentos importantes como los cotidianos, y se intercambian cartas, postales y correos electrónicos. Sus vidas han tomado rumbos muy distintos: Alex estudia medicina en Boston mientras Rosie, en Dublín, se esfuerza por sacar adelante a su bebé, fruto de una loca noche de pasión. "Donde termina el arco iris" nos presenta una selección de los divertidos y frescos diálogos que Rosie y Alex intercambian, y que nos llevan a conocer en profundidad sus respectivas vidas: sus complicados matrimonios, los esfuerzos por hacer sus sueños realidad... y la realidad de unos sentimientos que nunca se han atrevido a revelar.
Rosie Dunne y Alex Stewart se conocen desde que eran niños. Son mejores amigos, amigos íntimos, y no desean separarse por nada del mundo. Lamentablemente, al mundo le da igual lo que un par de amigos desee, y Alex acaba en Boston. Aunque las cosas son difíciles, ellos mantienen el contacto aunque la vida quiere poner su amistad a prueba y va poniendo continuos obstáculos frente a ambos. ¿Qué les pasará?
Lo primero que me sorprendió de este libro es la forma en la que está narrado, nunca me había encontrado un libro que estuviese completa y enteramente narrado a través de las notitas, cartas, emails, chats y postales que se envían los personajes unos a otros. Decir que cuando lo empecé me dejo alucinada es decir poco, pero la verdad es que en cuanto me acostumbré a esta forma de narrar la historia, me enamoré.
Si os soy sincera, hace tiempo que ya me había leído otro libro de esta autora (Posdata: Te quiero) y me había dejado bastante decepcionada, pero con Donde termina el arco iris afortunadamente no me ha pasado, es más, me ha hecho sentir de varias maneras diferentes. Y os tengo que advertir, que en este libro predomina la desesperación. Te vas a desesperar, yo me he desesperado, sabes que ellos están hechos el uno para el otro, las señales no pueden ser más claras, ¡hasta hay luces de neón señalándolos! Pero no, el mundo está en su contra, en nuestra contra, y lo único que quieres es meterte en el maldito libro, juntarles y decirles, ¡Besaros ya!
Pero dejando la maldita desesperación de lado, también podemos observar el amor de una madre por su hija, los esfuerzos que tiene que hacer cada día para poder sacarla a delante, como interpone la felicidad de su hija por encima de la suya, de verdad, he sufrido durante todo el libro con Rosie y en ocasiones he querido matarla porque me parecía que tomaba decisiones estúpidas, pero en el fondo la he acabado admirando.
No se me puede olvidar lo realista que es este libro. No es el típico libro en el que uno está enamorado del otro desde la infancia y no se atreve a decírselo o ese otro en el cual cuando uno de los dos se aleja, el otro se da cuenta de que no puede vivir sin él y que deben estar juntos. Este libro es mucho más, es la vida de dos personas que conocen absolutamente todo el uno del otro, que han compartido risas y castigos, que son verdaderos amigos, pero que no se han dado cuenta de que al cabo de tantos años, poco a poco se ha ido formando algo más grande y especial entre ellos.
No me quiero olvidar de los personajes y aunque hay algunos más que Rossie y Alex, no han tenido tanta importancia para mí a lo largo de la historia. ¡Necesito hablaros de Rossie y Alex! Ya que a ambos les vemos crecer y evolucionar a lo largo de las páginas, aunque es normal, sería muy raro que el Alex de 5 años fuese igual que el de 30, ¿no?
A lo largo de las páginas podemos ver como Rossie se tiene que ir enfrentado a la cruda realidad. Ya no es una niña, ahora tiene a alguien más a su cargo y a pesar de contar con el apoyo de sus padres, ella busca la manera de mantenerlas a ambas, tanto a su hija como a ella, a flote. Y a pesar de todos sus intentos, y de que algunos realmente le salgan muy bien, la suerte no está de su lado. Por otro lado, Alex está triunfando en Boston, ha logrado su sueño, parece tener una vida matrimonial estupenda, pero sigue siendo el mejor amigo de Rossie y siempre está ahí para apoyarla y ayudarla en todo lo que puede.
En definitiva, Donde termina el arco iris es el libro más desesperarte que se ha cruzado en mi vida, pero poder descubrir todo lo que esconde entre sus páginas merece completamente la pena.