Dorada a la sal

Por Cocinaconmarta
Si hay una receta veraniega por excelencia, para mí es la dorada a la sal. Es adecuada en cualquier época del año, pero es un clásico de mis veranos por lo fácil de cocinar y porque es perfecta para sorprender a la familia y los amigos.
Playa, piscina, llegar a casa, meter la dorada en el horno y estará lista en media hora. Mientras tanto, unas aceitunas y unas cervecitas o cocacolas bien fresquitas. Una rica ensalada para acompañar, y tenemos un almuerzo de lo más maravilloso!!
Las fotos son hechas con el movil, porque como os cuento, fue un día de playa fuera de casa; en la casa de verano de los padres. Así que improvisé como pude!!

Además quedaremos como el mejor de los Chefs, ya que lo suyo es servir la dorada aún cubierta de sal, y quitar la costra delante de todos. Igual que nos hacen en el restaurante.

Le decimos al pescadero que nos quite las entrañas. Si le decimos que las queremos para hacerlas a la sal, ellos sabrán lo que tienen que hacer.
Si la doradas son grandes, una para dos personas puede estar bien. Pero la cantidad de doradas, al gusto de cada uno.
  • Doradas frescas (una por persona, o una para dos)
  • 1 kilo de sal gorda (si vamos a hacer más de dos o tres doradas, compramos más sal)
  • Tres o cuatro dientes de ajo, perejil y rodajas de limón (opcional)

1. Cubrimos la base de una fuente de horno de sal gorda, y colocamos la dorada. Si le ponemos unos ajos machacados, perejil picado y una rodajas de limón, le dará un sutil toque de sabor.

2. Cubrimos las doradas de sal, tiene que estar totalmente cubiertas. Y humedecemos con una poco de agua, para eso, nos mojamos las manos y salpicamos la sal (una vez echada sobre las doradas). Facilitará que se forme la costra.

3. Horneamos 30 minutos a 200 grados.

4. La sal se va a hacer una costra, la rompemos y con ella es probable que se vaya la piel. Los lomos se pueden separar perfectamente de las espinas.

En la foto sale ya el lomo limpio, aderezado con una vinagreta de ajo y perejil que podemos hacer en unos minutos. Picamos unos ajos y perejil, añadimos un buen chorreón de aceite de oliva virgen y un poco de vinagre y un pellizco de sal. Mezclamos con energía, y ya tenemos nuestra vinagreta.