Pues bien, el otro día, por motivos de trabajo tuve que viajar a Córdoba, y, aunque la primera intención era cenar unas tapitas como manda la tradición, estaba lloviendo mucho y hacía mucho frío (si, si, en Córdoba), y al lado del Hotel había un restaurante Japonés al que no pude resistir entrar.
Evidentemente, acepté la recomendación gustosa, y, la verdad es que no me defraudó para nada, jamás había probado un Dorayaki tan bueno!!! Era una salsa dulce de té verde dentro del Dorayaki con un sabor similar, por poner una comparación, al sabor de las trufas de té verde... esa mezcla dulce-amarga que me encantó, por lo tanto, os recomiendo que si tenéis la oportunidad de probarlo, no dudéis ni un momento si sois aficionados al té como yo.