Hoy, 2 de marzo, a las ocho de la mañana entre el repique de campanas y el estruendo de cohetes, salía de la Iglesia Parroquial como es habitual, el Simpecado de la Divina Pastora junto a numerosos pastoreños para dirigirse a Almonte donde se venera a la Santísima Virgen del Rocío eventualmente como ocurre cada siete años. Acompañando el Simpecado por las calles de nuestro pueblo iba la escuela de tamborileros de la Hermandad que una vez más hace muestra de su buen hacer y de la gran labor que realizan por lo cual aprovechamos estas líneas para felicitarles. Desde la Parroquia, por las calles Iglesia, Pastora Solís donde el Simpecado fue saludado por la añeja campana de la Ermita de la Misericordia, Virgen de Fátima, Martin Rey y Polvillo hasta la “calzá” donde fue introducido en el autobús que lo llevaría hasta la localidad onubense.Antes de la celebración de la Misa, el Simpecado recorrió varias calles de Almonte hasta la Parroquia, donde actualmente se encuentra la Blanca Paloma, por la puerta principal del templo hizo su entrada el Simpecado precedido de los tamborileros y escoltado por los faroles y todos los pastoreños y devotos de la Divina Pastora, seguidamente dio comienzo la celebración de la Eucaristía presidida por El Rvdo. P. Don Antonio Guerra Milla, Párroco de Villanueva del Rio y Minas. La misma ha sido amenizada por el coro de la Hermandad que ha interpretado diversas composiciones alusivas a la Divina Pastora y a la Virgen del Rocío. La Hermandad le ha depositado un centro de flores a los pies de la Virgen del Rocío
Con el canto de la Salve a la Virgen ha finalizado la Misa mediante la cual esta representación de hermanos de la Divina Pastora ha ganado las gracias concedidas por el año jubilar rociero, motivo por el cual se ha organizado esta peregrinación. A pesar del frio, y el día laborable en que ha tenido lugar, muchos pastoreños no han querido perderse la misma trasladándose en los autobuses que ha dispuesto la junta de gobierno y en numerosos coches particulares, muchos peregrinos coinciden en la ausencia del Padre Álvaro en la Misa, así como en la fecha inapropiada para quemar cohetes, en cuaresma. Aun así los pastoreños han querido acompañar a su Divina Pastora demostrando la devoción y el cariño que siempre manifiestan cuando de su Pastora se trata.