Doyuno en Barakaldo

Por Theblackcity @Theblackcity
Normalmente me desespero cuando tengo que comer por Barakaldo. O voy a Sikera, o voy a Pepintxo (vegetariano). Es increíble la poca oferta (decente) que tengo cerca del curro, así que cuando mi amigo E (barakaldés él) nos descubrió Doyuno, mi abanico de opciones creció.
Un día tonto entre semana, se me alarga el trabajo hasta tener que quedarme a comer por Barakaldo, llamadita a J, a ver si me rescata y me acompaña a comer, y ¡premio! aquí que se presenta raudo y veloz. Como nos recomendaron I y E, nos fuimos a Doyuno. Sí, está un poco en el quinto pino, pero chica, J me llevaba en coche, asi que no había pega posible. 
Llegamos a las tres, y pedimos una mesa para dos, nos acercaron la carta, y pedimos agua para los dos, y una copa de blanco para servidora. Era eso, o liarme a tortas con alguien, así que mejor me tomo mi verdejo y que se me pase la mala leche del curro. Al mirar la carta vimos que no tenían menú del día, sino una formula parecida, que por unos diez euros (creo) había ensalada o lentejas, y de segundo escalope. Uys, pues como que no me motiva, mejor nos pedimos algo de la carta. Básicamente se compone de ensaladas a escala industrial, sartenekos y platos combinados, además de alguna opción en carnes y pescados. 
J se pidió una sarteneko com huevos y jamón serrano, con unas patatas caseras, que estaban de muerte. Yo, que iba en plan "me voy a  cuidar para la #operacionbuenorra2014" opté por una ensalada de langostinos y rape, una señora ensalada, como para tres, con lechuga (de verdad, hoy Florette tenía el día libre) y pimientos rojos y verde con cebolla pochados. La verdad es que el pescado estaba bueno, terso, en su punto, pero falló el dónde lo frieron, le sacaba un gusto a croquetas o algo así, vamos que usar la misma freidora para todo puede fastidiar un buen producto. Una pena. Sin embargo, los langostinos, bien colocaditos, servidos cocidos y con salsa rosa, estaban perfectos, a temperatura ambiente, algo que se agradece, que recién salidos del frigo estan de morir de malos. Lo bueno es que debido a la alergia de J, me los tuve que comer todos yo solita :)
Y para terminar, a penas podíamos más, pero J se le antojó la tarta de queso (es #fan) sencilla, no me convenció mucho, pero la ración fue hermosa, perfecta para compartir. Dos cafés, y ¡vuelta al trabajo!
BAR-RESTAURANTE DOYUNO
Ronda de Azkue, 43. Barakaldo

Un lugar perfecto para tomar una copa en su terraza tanto en verano como en invierno, un servicio y atención agradables y eficientes, y unos platos caseros, para salir al paso en un pueblo donde lo más fácil es acabar en Max Center comiendo una hamburguesa de un payaso que da pánico.

Comida de mediodía para dos, casi 30€