Aunque la novela me ha gustado en general, tengo que reconocer que para mí los primeros capítulos son insuperables, la forma en la que Stoker describe el ambiente y cómo te sumerge en él consigue que prácticamente vivas esa parte de la novela. No es que llegues a sentir miedo, pero algo de inquietud y malestar si que me llegó a generar. Esas sensaciones no volvieron a aparecer en toda la novela, salvo en algunos fragmentos del final. Probablemente esto se deba a que ya conocía la historia de Drácula, sino en todos los detalles, sí en los esenciales, como por ejemplo, la sed de sangre de los vampiros, que se convierten en murciélago etc. posiblemente esto hizo que fuera difícil alcanzar el clímax de los primeros capítulos.
En resumen, un clásico de la literatura que no dudo en recomendar.