Drácula, la historia jamás contada

Publicado el 29 octubre 2014 por Sassech @sassech


Título original: Dracula UntoldAño: 2014País: Estados UnidosDirector: Gary ShoreActores: Luke Evans, Sarah Gadon, Dominic Cooper, Zach McGowan, Samantha Barks, Thor Kristjansson, Art ParkinsonGénero: Terror. Drama | Vampiros. Drácula. Biográfico

Una historia original sobre Vlad Tepes o Vlad el Empalador, el príncipe rumano en el que se inspiró Bram Stoker para escribir su célebre novela (1897) y crear al vampiro más famoso de todos los tiempos. La película narra la trágica vida de Vlad, qué dilemas tuvo que afrontar y cómo se convirtió en un vampiro.


El lunes, gracias a la Fiesta del Cine, fuimos a ver la nueva versión de Drácula, pero yo lo que más ganas tenía era de ver al guapísimo Luke Evans en cada uno de los geniales encuadres que le daban en la peli, y ya está.
Drácula, la leyenda jamás contada, es el primer intento de Universal Pictures de traer y dar vida de nuevo una de las sagas de monstruo clásicas; es una película de vampiros, éxito-éxito. Tomando notas de Marvel y DC y viéndoles hacerlo a lo grande con sus conocidísimas franquicias de superhéroes como Iron Man, Capitán America, Batman y el sorprendente éxito de Guardianes de la Galaxia; Universal intenta hacer lo mismo con alguno de sus famosos monstruos, Frankenstein, La Momia y El Hombre Invisible.
En 1931, Universal triunfó con su brillante y terrorífico, Drácula. Hammer Film Productions entonces, tuvo una grieta con el vampiro transilvano en 1958, cultivando la más gótica y gore experiencia que nadie podría imaginar. Esta saga además, se enterró. Jugando a empezar el ciclo de nuevo, Universal debe esperar hacer al menos tan bien como sus predecesores.
Drácula, la leyenda jamás contada, sigue a Vlad III, de la Casa Dracul y su transformación de soldado a monstruo. Tras ser raptado por los turcos cuando era pequeño y criado para ser soldado conocido como Vlad, el Empalador, Vlad deja su vieja vida detrás cuando el sultán de los turcos le otorga su nuevo título, Príncipe de Transilvania. Mientras que en una misión, la patrulla de Vlad tropieza y apenas escapa de una antiguo maestro vampiro. Un poco más tarde Vlad es forzado a entrar en batalla contra la invasión de su raza adoptiva, los turcos, al negarse a ofrecer a la armada nacional, 1000 niños incluyendo a su hijo para reconstruir la fuerza imperial. En un intento desesperado, Vlad vuelve en busca del vampiro y...
Esta película, es una bolsa cajón desastre, donde visualmente todo parece real, pero quizás no parece vivo. Rodada en el Norte de Irlanda combinada con CGI de alto nivel, lo perdonarías ya que es de un ganador de Juego de Tronos. La interpretación es otro punto fuerte, Luke Evans, Sarah Gadon y Dominic Cooper tomando los papeles principales con una mención honorable a Charles Dance como el maestro vampiro.

Evans y Gadon hacen, como cabría esperar de esos dos, un trabajo feroz retratando a Drácula y su mujer. Gadon sobre todo ofrece a la película más emoción que cualquier otro personaje que se hubiera utilizado más. La entrega de Evans es poderosa; su Drácula es imponente y la pieza central de la pantalla, gracias a eso, como es a menudo el caso en este género, podemos disfrutar de planos de este hombre dignos de admirar. Como siempre, Charles Dance ofrece una interpretación virtuosa a pesar de estar en pocas escenas y logra conectar lo misterioso y espeluznante que es el maestro vampiro. Por otro lado, la banda sonora no fue especial, pero adecuada, por falta de una palabra mejor.
El defecto fatal de esta película es tristemente, la historia. Sin embargo, no creo que sea fallo total de alguien. Cuando se crean historias originales es mucho más difícil crear diálogos fascinantes del desconocimiento, para preparar la escena. Esas limitaciones siempre plagan los orígenes de las películas a menos que la pieza se aleje del canon normal del personaje y lo haga propio. ¿Por qué, debo preguntar, Universal no intentó recrear su infame personaje? Para redefinir Drácula. ¿Por qué no? Es una historia que ha sido contada tanto como Superman. Dicho esto, la mezcla de la vida de Vlad el Empalador y nuestro Conde Drácula favorito funcionó bien, solo que no lo suficientemente bien. Es una buena película. No la mejor, pero no la peor.