Desde hace unos días, esta girando por las salas cinematográficas italianas, una película que ya a despertado una serie de polémicas a varios niveles.
Se trata de Draquila, un documental de denuncia al mejor estilo de Michael Moore y su Fahrenheit 9/11.
La película ha sido dirigida y en parte protagonizada por la actriz cómica italiana Sabina Guzzanti, que también hace imitaciones, entre ellas la del Premier Silvio Berlusconi.
El titulo es mas que sugerente y hace referencia a como fue aprovechado con fines netamente políticos el terremoto que se produjo en Abruzzo en la zona de l’Aquila el año pasado dejando un terrible saldo de 308 víctimas fatales y centenares de familias a la intemperie, muchas de las cuales, hasta el día de hoy esperando una solución.
El objetivo principal del documental esta centrado en meter a la luz los entretelones, los grandes negociados en torno a la reconstrucción, la corrupción y el interés ciego por parte del gobierno por aprovechar al máximo esta catástrofe con el fin de aumentar no solo el concenso popular, sino de convencer al electorado.
El film ha sido presentado por estos días en el Festival Internacional de Cannes, con gran repercusión y aplauso multitudinario.