Drive, mola mazo

Publicado el 08 febrero 2012 por Gine @Gine_1414

Drive es la película de moda. Drive mola. Ryan Gosling mola más. Y la chaqueta de Ryan Gosling es orgásmica. Sí, sí, parece que Nicolas Winding  Refn y su estética retro hayan inventado la sopa de ajo, pero no es así. Drive tiene momentos interesantes y un personaje principal único, pero también tiene errores y secuencias gratuitas.
Drive nos cuenta la historia de un joven que es especialista de cine en escenas de acción en las que hay una persecución. Además, se saca un sobresueldo conduciendo en pequeños hurtos. El protagonista también trabaja en un taller mecánico donde su jefe lo trata como un hijo. Mantiene una vida solitaria y silenciosa. Su vida cambiará cuando por un lado su jefe le anima a participar en unas carreras después de haber hecho un trato con un mafioso para que le subvencione el coche; y paralelamente conozca a su vecina, madre joven con hijo cuyo marido está en la prisión.

El film nos trae una propuesta muy interesante durante la primera hora. La primera mitad de la película se dedica a descubrirnos y describirnos a un personaje principal de quien nunca sabemos su nombre. Su personalidad y lo que piensa es nuestro máximo interés durante toda la película. Tras la primera mitad centrada en el protagonista en la que se disfruta de cada detalle; el film se transforma en un thriller convencional en el que el protagonista se ve involucrado en un altercado de mafias, en el que también estará involucrado el marido exconvicto de su vecina y su jefe.
Drive no cuenta nada nuevo, es un thriller al uso y en cierta manera recuerda bastante a Taxi Driver, en la evolución del personaje protagonista hacia un punto en el que no hay vuelta atrás. O en la psicología de un protagonista del que nunca sabemos exactamente cómo piensa y cuál va a ser su siguiente movimiento.
El peso de los personajes es desigual. Ryan Gosling es amo y señor de la película y ofrece una asombrosa construcción de un personaje oscuro y ambivalente. A Gosling le acompaña Carey Mulligan, la chica de moda, quien tiene un papel muy simple y su actuación no pasa de ser correcto. Albert Brooks, el villano de la película, hace una actuación interesante, pero no deja de ser un personaje cliché del mafioso temido. También destaca la presencia de la chica Mad Men, Christina Hendrick; Bryan Cranston, quién después de verle en Breaking Bad se merece todos mis elogios; y Ron Perlman como matón con poco cerebro. Unos personajes simples que si los comparamos con el protagonista quedan de forma muy simple. Leí en una revista, que Drive pretende ser un cuento de hadas moderno, con un héroe, una princesa , un dragón y un villano. El problema es que a excepción de innovar con la concepción de un héroe particular, todos los demás personajes son más planos que la historia de Rapunzel o Pulgarcito. La película en muy pocos meses ha causado un gran boom. Se me escapa el motivo por el cual está teniendo tanto éxito, sobre todo dentro del mundo cinéfilo; como he dicho anteriormente lo único bueno es la construcción del personaje de Gosling y la actuación de éste; todo lo demás ya lo hemos visto. Pero una banda sonora de Cliff Martinez, con música moderna que le dan una atmosfera particular; ciertas escenas de acción bien llevadas; el ralentí made in Ritchie; y la actuación en plan “bad ass” de Albert Brooks parece que la catapultan en lo más alto.
NOTA: 6/10