Dulcería Celaya: la manía de endulzar a los mexicanos

Por Nicopasi

Hasta que me lo contaron yo pensaba que sólo los monumentos u otras obras de arte significativas podían ser consideradas patrimonio cultural, pero nunca imaginé que un cartel también. El dueño de la Dulcería Celaya (ubicada sobre la Calle 5 de Mayo a pocos metros del Zócalo) me contó que no sólo eran el negocio del rubro mas antiguo de la ciudad de México sino que, además, estaban orgullosos de que su cartel, de un claro estilo emparentado al Art Nouveau, habían sido declarados por UNESCO como patrimonio cultural.
Pero el hecho de tener uno de los carteles más reconocidos y emblemáticos del centro mexicano no es la razón por la cual, a diario, pasan miles de personas frente a ella e ingresan como si se tratara de un santuario puesto que hay otros elementos que la hacen digna de ser conocida y que bien valen la pena tener en cuenta cuando se esté visitando la zona.
Según cuentan la dulcería fue inaugurada en 1874 por los Hermanos Guizar (dos mexicanos que contaban con una buena posición económica por aquellos años). Estos, junto con su familia, al principio vendieron masas y dulces elaborados que compraban listos para consumir a diferentes proveedores, hasta que en un momento decidieron fabricar ellos mismos su propia mercadería. Así es como pusieron una pequeña fábrica en el sótano donde actualmente reside el negocio y poco a poco fueron haciéndose de un nombre en la sociedad mexicana y ganando cada vez más clientes.
Con el tiempo se transformaron en un clásico y, desde entonces, no pararon de crecer, tanto que hoy son parte una parte indivisible del centro de la ciudad. A diario por sus escaparates pasan miles de personas que entran y salen con paquetitos que envuelven algunas de las delicias que forman parte del amplio repertorio de manjares que fueron bautizados con nombres que evocan a historias de realismo mágico.

Las tortillas acarameladas (muy parecidas al hojaldre argentino), el dulce de cajeta (lo más parecido que hay -fuera de Argentina-al dulce de leche) y el rompope (licor de huevo típico de México) son tres excelentes opciones para probar dulces típicos o bien para llevar como souvenir (Si deciden comprar rompope tengan en cuenta que por normas internacionales están permitidos hasta tres litros de alcohol. Esto se los aviso por que es muy probable que los dos litros restantes los ocupen con una botella de tequila y otra de mezcal, la famosa bebida del gusanito muerto)

Los suspiros, las encaneladas, los puerquitos, los aleluyas, las lagrimitas y los huevitos de Puebla parecen una verdadera obra de arte exhibidos en los escaparates de la Calle 5 de Mayo. Lo más recomendable es observar primero la amplia oferta que hay para comprar y después, ya con una idea, entren y pidan algunos de ellos para probarlos. Los empleados son muy amables y suelen ofrecer sin problemas algunas piezas a modo de degustación para que elegir se haga un poco mas fácil.

Las frutas cubiertas (de un almíbar que les otorga una textura difícil de definir) son las elegidas por los turistas que pasan por allí, ya que por una suma ínfima les permite probar varias de las frutas. Entre algunas de ellas se pueden pedir ananá, batata, zapallo, zanahoriasm higos, uvas y hasta incluso frutillas, cerezas y frutos del bosque.
Si bien la dulcería no es un lugar donde hayan transcurrido hechos significativos de la historia de México (como lo son el Café Tacuba o el Bar La Ópera) bien vale la pena dedicarle un rato cuando se está visitando la zona del Zócalo, ya que ella en sí misma, podría estar considerada una obra de arte ya que los interiores del local cuenta con unos techos revestidos en madera muy interesantes y una ambientación clásica tal cual como en aquellos años en que comenzó a funcionar. Además allí podrán encontrar un lugar propicio para encontrar souvenirs que representen fielmente el espíritu del ser azteca, especial y totalmente diferente de otras culturas.
Más información
Dulcería Celaya 
Direcciones
(La que está ubicada en la zona del Zócalo se encuentra aprox. a 400 metros de la Catedral).
Metro: Allende, salida Zona 4 Caminos (Col. Centro)
Horario: Lunes a Domingo de 10.30 a 19.30
Aceptan todas las tarjetas de crédito y débito.