Pasito a paso.
Nuestro principal objetivo es que los niños cuando sean mayores, consigan dominar el inglés de una forma total. Lo que conocemos como bilingüismo. Y para eso, debemos tomarnos nuestro tiempo, empezar pronto (cuanto antes mejor), hacer planes sobre el método de enseñanza, y asumir nuestra parte de culpa cuando no evolucionan, o no aprenden bien el inglés. Yo siempre he pensado, que cuando un niño no aprende, la mayor culpa es de su profesor. (Sin quitarle su parte de responsabilidad al niño). El profesor debe buscar los medios y las formas para conseguir llamar la atención al niño que está estudiando. Es por ello, que los juegos, es una de las mejores formas que podemos encontrar para que los niños aprendan inglés.
Visto lo visto. Es hora de organizarnos. Como decimos, debemos ir con calma y paciencia. Ningún idioma, ni siquiera el inglés se aprenden en un par de meses. Ni siquiera en años. Es más tiempo de dedicación y de mucha constancia. Que es el principal motivo, por el que en España, no tenemos buen nivel de inglés. La clave es conseguir involucrar al niño en el idioma. Para ello tenemos muchas formas. Aunque es evidente que no es fácil de hacer.
Uno de nuestros métodos cuando damos los “workshops” de inglés en la academia de la guardería. Es que los niños tengan que venir a ayudar a la profesora. La cual, no sabe hablar español y está muy solita. Así es que la labor de los niños no es aprender inglés. Sino jugar con la profesora que como solo habla inglés está muy solita. De esta forma conseguimos que los niños se sientan involucrados y no sea algo que tienen que aprender de memoria. Sino que le encuentran una utilidad y un fin al nuevo idioma que les estamos introduciendo. Descubriendo así que el inglés les es muy útil para muchas cosas. Y una muy importante, la relación con otras personas de su especie. Con las que no tiene otra forma de relacionarse.
A comer dulces.
Los dulces es parte de la alimentación de casi cualquier persona. Y aunque a todos nos gustan. Los niños sienten una especial pasión por ellos. Podemos englobarlos en dulces, o incluso podemos hablar de postres. Según las costumbres de nuestra familia. Lo que si tenemos claro, es que los dulces, forman parte de las comidas o alimentos. Y como tal, será de los primeros temas o ejercicios que haremos con los niños para aprender a hablar inglés. Aunque siempre es conveniente que empecemos por otro tipo de comidas, como las frutas, pastas… De hecho, los dulces es un complemento que aunque está muy rico no es muy saludable. Con lo que debemos tener cuidado cuando los introduzcamos en inglés.
Siempre que hablemos de comidas con los niños, debemos trasmitirles la importancia de la alimentación saludable. (Algo que los ingleses no toman muy en serio). Uno de los puntos que siempre digo, es que los niños deben conocer diferentes culturas. Y cuando les enseñamos inglés es un buen momento para presentarles diferentes aspectos de la cultura inglesa. Y las comidas son ideales para que las aprendan. Aunque en muchos casos es muy diferente.
Juegos en inglés con comidas.
Lo mejor de las comidas es que nos dan mucho juego con los niños. Podemos hacer un gran número de actividades para que los niños memoricen y se acuerden mejor de como se dice cada comida en inglés y por supuesto también pasa lo mismo con los dulces. Y todo a través de los juegos educativo que buscan enseñar a la vez que entretienen a los más pequeños de la guardería o de primaria.
Una actividad que nos es muy buena, no solo para enseñar el vocabulario en inglés, sino que además nos sirve para enseñar cultura a los niños. Es ir al mercado a hacer la compra y si han sido buenos y queremos que aprendan los dulces en inglés. Podemos pasar por la tienda de las chuches después. Será el sitio ideal para que los niños vean diferentes dulces. Y además aprenda a que aunque el quiera, no puede comerse todo lo que ve en la tienda. Tan solo tendremos que enseñarle algunos de los nombres en inglés de algunos dulces. De hecho, al igual que en español, en inglés utilizamos la palabra “candy” para muchos tipos de dulces como caramelos. Con lo que no tendremos tanto vocabulario en inglés, como cuando estamos estudiando otras comidas o grupos de alimentos.
¿Qué tal si hacemos un buen bollo? La cocina siempre ha sido un buen aliado para enseñar a los niños. Y con la moda que estamos viviendo sobre los programas de cocina para mayores y para niños. Es el mejor momento para que lo utilicemos esto para enseñar al niño. Y no me refiero solo para que el niño aprenda inglés. Sino que la cocina puede enseñar también responsabilidad y colaboración. Así es que por ejemplo los domingos. Los podemos utilizar para meternos en la cocina con nuestro niño y hacer cada semana un bollo o un pastel. Seguro que los primeros nos salen mal. Pero, ya verás la satisfacción de tu niño cuando se coma el primer dulce que él mismo ha hecho.
También podemos colorear dibujos de dulces para que se le grabe en la cabeza la palabra en inglés con la imagen que queremos. Una de las actividades o juegos más completos que podemos hacer con nuestro niño de menos de 4 años y que gusta a niños mayores por igual. Es la de colorear. Por eso puedes encontrar un gran número de dibujos para colorear de comidas y elegir el que más os interese para enseñar el inglés a tus niños.
Los vídeos y el desarrollo
Los vídeos en inglés ayudan a los niños con la memorización y además hacen que los niños pasen un buen rato jugando. Por ello, en British Bubbles la guardería de Salamanca, tenemos siempre un vídeo educativo en inglés para complementar el tema que estamos estudiando en cada momento. Y no iba a ser menos cuando hablamos de los dulces o las chuches en inglés. Ponle el vídeo a tu niño y a ver cual de los bollos o dulces le gusta más. Disfruta aprendiendo inglés con tu hijo.