El secretario de Convèrgencia i Unió, Josep Antoni Duran i Lleida ha vuelto a indignar a la comunidad gay al defender que la homosexualidad es una enfermedad que se puede curar.
En su habitual discurso homofóbico, Duran i Lleida ha declarado en una entrevista concedida a la revista Vanity fair que defiende el “derecho” de aquellos que quieren acudir al psicólogo para cambiar su orientación sexual.
Miembros de su partidos entre los que se encuentra la diputada de CIU, Mercè Pigem, se han apresurado a censurar las palabras del líder del partido. En un comentario difundido en Twitter, Pigem asegura que la homosexualidad no es una enfermedad y que “Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) tiene las listas llenas de gays!”
El diputado de la misma formación Carles Campuzano, ha arremetido también en contra de las palabras de Duran, alegando que el partido es “quizá la fuerza con más cargos gays” y censurando que alguien pueda recomendar ir al psicólogo por ser homosexual.
Durante la aprobación de la reforma del código civil que permitiría el matrimonio de parejas homosexuales en España, Duran fue uno de los mayores oponentes políticos al cambio, alegando siempre que dos personas del mismo sexo no podían formar un matrimonio. Ha sido también un férreo defensor de las “técnicas para curar la homosexualidad”.
Diferentes organizaciones estadounidenses que promueven la cura de la homosexualidad han sido acusadas de financiar proyectos que han derivado en asesinatos selectivos de gays y lesbianas en África.