Dwight Clark y la atrapada que cambió la historia de la NFL

Publicado el 05 junio 2018 por Primeroydiez @Primeroydiez

Una brillante luz en la NFL desapareció en el horizonte del día de hoy. Dwight Clark, una parte vital de los 49ers durante la era Bill Walsh, falleció por secuelas de una enfermedad con la que estaba batallando desde hace mucho: Esclerosis Lateral Amiotrófica. El legendario 87 de San Francisco dejó de existir y se convirtió en uno de los fantasmas de la franquicia que vivirá en la memoria de la historia de la NFL.

Dwight Clark nunca fue el jugador más rápido, fuerte o dominante de su equipo. Tampoco tuvo los números más impresionantes o impuso récords en la liga durante las nueve temporadas en las que participó. Si uno ve sus estadísticas jamás quedaría sorprendido o esperaría que fuera un jugador que marcara época. Sin embargo él se encargo de cambiar por completo la historia de la NFL. El 10 de enero de 1982 hizo esto:

Aún tengo escalofríos cada vez que veo esa jugada. Es magia y el nacimiento de la que considero la dinastía más dominante en la historia de la NFL. Esa tarde no sólo Dwight Clark hizo la jugada más importante de su carrera, sino que puso a los 49ers en el mapa, en su primer Super Bowl y en el comienzo de una de las eras más dominantes de cualquier equipo que sólo pudieron ser frenadas con huelgas de jugadores.

Y justo Clark tenía que hacer esa jugada, no había alguien más. Una combinación entre suerte y talento para estar en el lugar correcto, en el momento ideal y saber aprovechar su oportunidad fue lo que definió su carrera tantas veces. Dwight nunca creyó que su lugar en la NFL estaba asegurado (fue un pick de décima ronda en 1979) y siempre se esforzó de más para mantener un lugar en el equipo.

La suerte de estar en el lugar indicado en el instante correcto.

La fortuna le sonrió a Dwight Clark no sólo para estar en la NFL, sino para terminar en los 49ers. Esta es la anécdota de cómo llegó a la NFL:

Durante el Draft de 1979 Bill Walsh fue a la universidad de Clemson para hacer un scouting de su QB, Steve Fuller. Clark era su compañero de cuarto y quien contestó el teléfono cuando Bill llamó para ver si podía ver a Steve lanzar. El QB necesitaba alguien que atrapara esos pases y Clark estaba a punto de salir a jugar golf, pero decidió acompañarlo.

Clark sorprendió a Walsh ya que atrapó todo lo que estaba cerca de él esa tarde, así que fueron a ver video juntos. Analizaron las 11 recepciones que tuvo en su año senior, mientras Bill le preguntaba innumerables cosas sobre lo que veía y analizaba en cada una de las jugadas. En ese momento Walsh supo que Dwight Clark podía convertirse en una pieza clave de su ofensiva y decidió tomarlo con el pick 249 del Draft 1979, a pesar de que muchos de los Scouts se opusieron, debido a que creían que nadie lo iba a seleccionar y podían contratarlo como agente libre. 

Esta anécdota es de un artículo que publicó Sports Illustrated en una de las últimas visitas que tuvo Dwight Clark con sus amigos y compañeros. Pueden leerlo aquí:

https://www.si.com/nfl/2018/05/03/dwight-clark-als-49ers-reunion-eddie-debartolo

La jugada que cambió el rumbo de la NFL

Sprint Right Option, Joe Montana y Dwight Clark se inmortalizaron en la historia de la NFL con una de las jugadas más emblemáticas que puso al fin de una dinastía y forjó, para mi gusto, el inicio del equipo perfecto.

“Fue un gran partido, tal vez el mejor juego en el que participé en toda mi carrera. The Catch es tan memorable que sólo tienes que decir el nombre y todo mundo sabes de lo que estás hablando. Le permitió a un equipo, con novatos que no sabían absolutamente nada y con veteranos que se aferraban a un sueño, tener un lazo que nos uniría por siempre”, recordó Joe Montana

“Estaba corriendo hacia mi derecha con la defensiva de los Cowboys encima. Vi a Dwight en el fondo de la Zona de anotación y lancé el pase. Él se levantó y lo atrapó, justo en ese momento durará toda la eternidad”, son las palabras de Joe Cool sobre ese momento.

La familia de Mr. D.

Mi padre me enseñó que las personas que trabajan con nosotros se convierten en parte de nuestra familia.

– Parte del discurso de Eddie DeBartolo durante su inducción al Salón de la Fama de la NFL en 2016

Hasta los últimos instantes de la vida de Dwight Clark, Eddie DeBartolo Jr. estuvo cuidándolo. Mr. D se encargó no sólo de buscar una cura para su receptor, sino de que estuviera acompañado por familiares y amigos durante el momento tan complicado de su enfermedad.

De hecho Clark hizo un claro hincapié en todo lo que Mr. D significa para él durante la ceremonia que le hicieron la temporada pasada en el Levi’s Stadium:

“Cuarenta años después aún sigue cuidándome. Ha buscado por todo el mundo una cura para el ALS. Me mandó a Japón para recibir tratamiento. Nunca podré agradecer lo suficiente a la familia DeBartolo y a Eddie D por lo que han hecho”, fueron las palabras de Clark desde un palco.

De hecho puedes leer la gran crónica de ese momento aquí:

49ers icon Dwight Clark: ‘I need your prayers and thoughts’

Realmente extraño a dueños como DeBartolo. En una NFL actual donde les importa quedar bien con ciertos públicos y someter cualquier muestra de expresión de los jugadores, la forma de hacer negocios de Mr. D, el cómo trata a su “familia” es una bocanada refrescante y que me hace creer que aún hay salvación para la gran división que existe en este momento en la liga.

El legado de Dwight Clark

El mensaje con el que me quedo de la vida de Dwight Clark es: aprovecha tus oportunidades, disfruta de la vida y sonríe (sólo googlen sus fotos sonriendo con Huey Lewis, Joe Montana, Bill Walsh y muchos más). Hay que estar preparado para todo lo que la vida nos ponga enfrente y siempre dar lo mejor de uno mismo. Nunca dar nada por hecho y siempre trabajar por lo que quieres, aunque la situación no sea la más sencilla.

Dwight Clark fue una persona (y un jugador) que hizo justamente eso. Pero además se encargó de mostrar su mejor cara al resto del mundo, hizo una enorme cantidad de amigos y extendió su familia más allá gracias a la NFL. Y la fortuna le sonrió con un momento que nadie olvidará y que nadie le podrá quitar. Gracias por The Catch y gracias por todas las lecciones Dwight Clark.