Polly Higgins, abogada británica, quiere que los actos que atenten contra la naturaleza no queden impunes. Ella está luchando para que la ONU acepte un quinto crimen contra la paz, el ecocidio, de forma que La Tierra deje de ser un bien inerte que se compra y vende por un determinado precio y pase a ser considerado como un ser vivo, que cuenta con su propio derecho a la vida. Según Higgins, el ecocidio no solamente es un crimen contra la humanidad, sino también contra la naturaleza, las generaciones futuras y la paz. La extracción de las arenas bituminosas de Alberta, Canadá, y la destrucción del Amazonas constituyen para Higgins dos de los ejemplos más sangrantes de que La Tierra necesita un abogado. En su charla para TED Talks, Higgins concluía que sólo mediante un cambio en las políticas de subvenciones y una modificación en el destino de las inversiones públicas podrá lograse un cambio de objetivos de los intereses económicos de las grandes multinacionales que están esquilmando el planeta.
23.11.2012, ladyverd.com
La abogada Polly Higgins se encontraba ante el tribunal en Londres representando a un hombre que había resultado gravemente herido en un accidente laboral cuando miró por la ventana y pensó que La Tierra también necesitaba un abogado. La Tierra, al igual que su cliente, había sufrido graves perjuicios y dańos y también necesitaba que alguien le diera voz y la defendiera ante sus atacantes.
Hoy en día estamos siendo testigos de la destrucción masiva del planeta y de los seres que lo habitan. Este proceso destructivo lleva también a la extenuación de los recursos naturales, con los consiguientes conflictos y luchas por su explotación. Las guerras, según expone Polly Higgins, no son más que la consecuencia directa de la explotación masiva de los recursos naturales, de la falta de respeto por la vida en general. Es este un círculo vicioso que solamente puede interrumpirse mediante la introducción de una ley que regule el ecocidio.
Ecocidio: destrucción masiva o pérdida de ecosistemas de un determinado territorio, ya sea debido a la acción del ser humano o a otras causas, en tal medida que se reduce de forma importante el disfrute pacífico de los habitantes de dicho territorio. El ecocidio puede ser provocado no solamente por la acción del hombre, sino también por los eventos meteorológicos extremos. Polly Higgins propone que esta ley sobre ecocidios obligue a los países a indemnizar a los damnificados por tales desastres naturales. Higgins se refiere en especial a las 54 islas-nación que se encuentran en peligro de desaparecer debido al aumento del nivel del mar provocado por el cambio climático. Un marco legal que obligara a las naciones a ayudar a quienes están sufriendo los efectos del cambio climático cambiaría la postura de pasividad que estamos viviendo hasta ahora y conllevaría la obligatoriedad de avanzar en un tema que se encuentra estancado y que ya está causando estragos entre la población mundial.
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