ECONOMÍAS VERDE, AZUL, NARANJA…
¿La economía es un mundo de color? Evidentemente no. No obstante algunos teóricos, combinan economía con determinado color, para ponerle apellido, para acotar a una actividad económica concreta, para definir a una rama especializada de la economía. Y en algunos casos… “para vender su libro”.
Inicio por la economía verde (green economy) por ser la más conocida y de mayor actualidad. Actualidad derivada del anuncio del Presidente Trump, de que EE.UU. va a abandonar el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. Acuerdo de Diciembre del 2015, y firmado por 196 países. No obstante, California ya ha anunciado que seguirá su Programa Energético, según el cual se prevé que para el año 2040/2045, todos los edificios del estado utilizarán energía proveniente de energías renovables. Hoy prácticamente ya son la mitad.
La economía verde o economía medioambiental, es la representativa de la sostenibilidad, la ecología, el medio ambiente, y del cambio climático; de la agricultura ecológica, las energías renovables, la gestión de residuos, la lucha contra la contaminación, actuaciones en aguas, mares y costas (algunas opiniones esta actividad la relacionan con la economía azul), y las actividades relacionadas con preservación de los recursos y espacios naturales.
La economía azul (blue economy), viene a ser la respuesta para los que entienden que la economía verde es insostenible. Está inspirada en el planeta Tierra y en la evolución de los ecosistemas naturales, para aprender de ellos a ser eficientes en la producción de bienes. En mi opinión, puede considerarse como un híbrido entre la economía verde, la economía circular (por el aprovechamiento de los residuos) y parte de la economía del bien común (por la responsabilidad compartida). La economía azul, pretende optimizar el rendimiento de los recursos disponibles actuales desde un modo sostenible, y el máximo aprovechamiento de los residuos, al considerarlos fuentes de riqueza. Y entre otras acciones, que deberían reducirse notablemente los kilómetros que “viajan” los alimentos.Como he comentado anteriormente, algunas versiones ubican las actividades en beneficio de las aguas, costas y mares, como economía azul.
El concepto de economía azul, fue “inventado” y desarrollado por un economista belga, Gunter Pauli (1956). Según su teoría, es un modelo macroeconómico y de negocios, orientado a responder a las necesidades de los consumidores con los recursos localmente disponibles. Según su filosofía, la economía verde es “elitista” porque ofrece productos ecológicos a alto precio. Es autor del libro The Blue Economy, publicado en 2010.Un ejemplo de economía azul, puede ser Iberfunghi, empresa aragonesa que con los residuos del café, cultiva hongos y setas comestibles de alta calidad y produce abono para plantas. Otro ejemplo es una empresa creación del citado Pauli, dedicada a producir detergentes biodegradables con restos de cáscaras de naranja.
La economía naranja (orange economy) o economía creativa, es la actividad económica generada por las industrias y empresas dedicadas a la producción de actividades culturales. Esta denominación es principalmente utilizada en algunos países sudamericanos. Se ha adoptado el color naranja, al ser asociado y comúnmente aceptado con la cultura, la creatividad, y… con ¡la felicidad!
John Howkins, especialista en el tema de la “industrias creativas”, define a la economía naranja, como aquella que comprende a los sectores en los que el valor de los bienes y servicios se fundamenta en la propiedad intelectual. Sectores que van desde la arquitectura, las artes visuales y escénicas, pasando por el cine, la música, el diseño editorial, la artesanía y la moda.
Si la economía naranja, pretende convertir una idea creativa en negocio, este grupo de actividades empiezan a crecer y a consolidarse como una nueva forma de emprendimiento y actividad empresarial. ¿Conocía que el Circo del Sol, da trabajo a más de 5.000 personas?
Un concepto al que nos tenemos que habituar es el Fashion Tech, la combinación de moda y tecnología, que va a cambiar la forma de diseñar, fabricar, vender y distribuir la moda. Recientemente se ha celebrado una inmersión y encuentro de empresas de moda españolas en Silicon Valley, para desarrollar esta combinación moda/tecnología.
El marketing de muchas compañías, también “juega” con los colores.Prácticamente cada compañía se identifica con un color. Resulta patente la importancia que un color puede tener a la hora de una decisión, y como puede utilizarse para transmitir muchas y muy distintas sensaciones.
El color rojo, transmite pasión y lujo, un color muy llamativo y emocional, capaz de generar distintas sensaciones. El verde es un color muy usado en la actualidad, debido a sus connotaciones “verdes” y por transmitir sentimientos positivos. El azul tiene un alto componente de solidez, transmitiendo la sensación de que la empresa es segura y fiable. El amarilloes un color muy llamativo y brillante, que refleja gran parte de la luz, lo que tiene efectos estimulantes. El negro, es el color del lujo, la seriedad y la elegancia, por lo que en muchas ocasiones se usa para transmitir calidad.
Para finalizar un deseo “en colores”, ¡que lleguemos a final de mes en números “azules”, no en números “rojos”!
Miguel Angel OTIN LLORO
Publicado en DIARIO DEL ALTOARAGON "Suplemento Económico"el 07 de junio del 2017