El proyecto personal de Dustin Weaver en el número tres me había parecido lo más atinado y positivo que habíamos visto; planteaba a un Spider-Man diferente en todos los aspectos con personajes bien logrados, explorables e interesantes. Como dije en la reseña del comic, solo el número cinco podría ponerse a su altura, y si, lo logra.
Gerard Way nos regala una historia sobrecargada de guiños y potencialmente influenciada por películas ochenteras. Hay una tendencia al estilo asiático y su protagonista podría recordarnos al personaje de Natalie Portman en Leon: The Professional. Peni Parker se mueve entre la inocencia de la niñez y la responsabilidad de la adultez, sin dejar de sentirse como un adolescente. Un protagonista muy bien estructurado que sin problemas, logra llevar la historia.
La adaptación de Mysterio es retorcida y en extremis chiflada: otra interesante idea para desarrollarlo en el cine. Los cameos y guiños, como la aparición de Daredevil son bien aprovechadas y dejan ver el buen uso de los personajes de apoyo de Way, quien se da el lujo de aparecer en su ahora, favorito traje azul y corbata roja. ¿Lo notaron? -Hesitant Alien-.
En los lápices Jake Wyatt nos remonta a los 80’s con un estilo arriesgado apegado a lo que Way pretende. Huele a Blade Runner gracias a los colores de Ian Herring quien tiene unos contrastes espectaculares. Hay tiempo, espacio y presencia, no dejando caerse en lo ficticio del argumento, al contrario.
Se adhiere mejor que otros números previos a Spider-Verse en las páginas finales, sirviendo mejor como capítulo cerrado pero dejando la puerta abierta. La originalidad de adaptar a Spider-Man de esa manera debe ser reconocida y aunque no descubre el hilo negro, ni mucho menos aporta ideas verdaderamente únicas, es una rica ensalada de conceptos potentes y no vistos en el arácnido.
Edge of Spider-Verse 5 cierra con broche de oro las presentaciones de nuevas ediciones del trepamuros llevándose las palmas. Gearard Way enseña sus armas y responde bien al encargo de Marvel; se aleja de los conceptos básicos de Spider-Man pero nos regala un sensacional comic de otra índole. El mejor comic de la miniserie, nada que reprocharle.