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Tengo muy claro que me encantan las ediciones de lujo con bonitas portadas ¿A quién no? Y sobre todo cuando el precio no es excesivo (lo que es raro estos días). Me encanta llevarme libros agradables a la vista y al tacto a casa. Pero he sido testigo que muchas veces estos bellos envoltorios lo único que hacen es engañar.Sé que aquí juega mucho los gustos personales y no los voy a cuestionar. Si a mi me pareció un bodrio a ti te puede encantar, etc. Pero me consta que hay libros con argumentos flojos o con sinopsis que no te llaman nada pero con unas portadas o unas ediciones de lujo que quitan el hipo.
Te ves tentado a llevártelo y terminas comprándolo. Lo que me mosquea es que te compres un bello libro convencido que será la hostia y cuando lo termines la decepción sea mayúscula. Es cuando me pregunto si las editoriales son consientes de ello y promocionan sus novedades-bombazo con este tipo de ediciones (de esos libros que mucho ruido y pocas nueces)
Yo prefiero un libro con una portada fea e incluso muy normalita pero que me guste mucho. Así no me creo expectativas falsas o me doy de bruces contra la pared. Considero que en la actualidad, en muchos casos, una portada llamativa vale más que la calidad literaria y preferimos conservar el libro en la estantería por bonito que por bueno.
Me quedan varias dudas ¿El objetivo es vender un libro "bonito" a toda costa? ¿Una edición currada vale más que la calidad? ¿Como lectores nos hemos sentimos engañados o timados? Yo sí.Queda abierto el debate.