Educación en diferido

Publicado el 18 diciembre 2016 por Diegvs @DIEGVS
Cuando tenía 8 años se nos ocurrió un juego a mi amigo César y a mí. Consistía en que cuando viéramos un calvo, lo llamaríamos cabestro. No teníamos ni idea de lo que era. Simplemente nos encantaba la sonoridad de la palabra. Ca-bes-tro. Un día saliendo de casa vi un calvo. Grité fuerte: ¡Cabestro! Cuando me di la vuelta, con la sonrisa en la cara, aún terminando la última sílaba, me encontré un contundente bofetón de mi padre. No hizo falta mucho más. No se debe faltar el respeto a los demás. Aprendí muy rápido. Lección aprendida.
Esta semana he conocido a un mozalbete de 20 años, llamado MrGranbomba, que es, o era, youtuber. Parece ser que tras el revuelo mediático generado ha decidido cerrar su canal y sus redes sociales. Reconozco que nunca antes había oído hablar de él. Según he podido averiguar su único oficio era subir vídeos a YouTube realizando bromas de cámara oculta, mofándose de la gente por la calle, insutándolas sin motivo, para ver su reacción. Lo curioso es que tenía más de medio millón de seguidores. Como es lógico, monetizaba las visitas a su canal. Ganaba dinero con estos vídeos. En una de sus últimos vídeos trató de hacer una broma a un trabajador llamándole caraanchoa. Éste se molestó, y aunque trató de convencerle de que era una broma y un trabajo para la universidad no lo consiguió. El resultado fue contundente. El tipo le propinó una sonora bofetada al niñato. Si no lo han visto, se lo recomiendo. El sonido del sopapo es sencillamente embriagador. Casi hipnótico.
No vamos a justificar nunca una agresión. Eso es evidente. No creo que nadie en su sano juicio defienda la violencia. Pero ¿no es eso precisamente la esencia de este tipo de bromas? ¿No es llevar a la víctima al extremo y ver su reacción? En este caso, el bromista encontró la horma de su zapato. Provocó a un tipo por la calle y le dio un tortazo. Era una posibilidad. Es semejante a los deportes de riesgo. La esencia es la subida de adrenalina. Si le da miedo hacer puenting, súbase a un tobogán infantil. Es un mal endémico de esta generación. Piensan que el mundo les pertenece. Que pueden hacer lo que gusten sin ninguna repercusión. No son conscientes de las consecuencias de sus actos. Solo conocen sus derechos pero ningún deber. Permitimos que nuestros hijos hagan todo porque si no coartamos su libertad y podemos provocarles traumas. ¡Qué gran error! Parafraseando a Mª Dolores de Cospedal, recibió una educación en diferido. Lo que no le han enseñado sus padres cuando era pequeño se lo ha enseñado la vida. Y claro, ser educado, duele.

Piensen.

Sean buenos.

La canción regalo de hoy viene de la mano de doña @RaquelMtnez_tv y es Numb. Todo lo que quiero hacer es ser más parecido a mí y ser menos como tú. Con todos ustedes: ¡Linkin Park!

https://www.youtube.com/watch?v=kXYiU_JCYtU