Dos actores protagonistas, reconocidos, que saben no llamar la atención pero siempre logran papeles interesantes: Scott Speedman ("Los extraños", "Underworld") y Kelly Reilly ("Sherlock Holmes", "Orgullo y Prejuicio"); que encajan perfectamente en una historia a la que le falta presumir y tener más ambición. Narrativamente correcta, y seguramente mucho más interesante de lo que cabía esperar. Os dejo, como siempre, una breve sinopsis:
"Un veterano de la Segunda Guerra Mundial y hombre de familia que se volvió ladrón de bancos. Frustrado y decepcionado por las circunstancias de la posguerra, Edwin Boyd es un hombre que se debate entre la necesidad de mantener a su joven familia y un sueño incumplido de dirigirse a Hollywood para convertirse en una estrella. Cuando descubre una forma de satisfacer todas sus necesidades (robar bancos "al estilo de Hollywood"), su sueño para el estrellato le lleva por un camino inesperado de gangsterismo, peligro y tragedia". (estrenoscinema.es)