EE UU: Liberan a un hombre que pasó 30 años sentenciado a muerte

El estadounidense Glenn Ford fue condenado a morir electrocutado en 1984, por el robo y asesinato de un joyero

Un tribunal de Luisiana decidió absolver a un estadounidense que ha pasado casi 30 años en el corredor de la muerte, a la espera de ser electrocutado. El excondenado, Glenn Ford, había sido acusado de robar y asesinar a un joyero, al que siempre negó haber matado. 
El tribunal absolvió a Ford, un afroamericano de 64 años y nativo de California, tras recibir nuevas informaciones que prueban su inocencia en el asesinato.
Medios locales informaron de que Ford fue liberado de la prisión estatal de Luisiana anoche. A su salida, el afroamericano admitió tener cierto "resentimiento" por haber pasado buena parte de su vida encerrado en la cárcel por un delito que no cometió. "Mi mente va a todo tipo de direcciones, pero me siento bien", dijo Ford a los periodistas. "Mis hijos eran unos bebés cuando me fui, ahora son hombres adultos con niños", añadió.
La juez distrital del estado Ramona Emanuel, anuló la condena y sentencia de Ford, el lunes, tras recibir nueva información que respaldaba las afirmaciones que él no se encontraba presente ni estuvo involucrado en la muerte de Rozeman, dijeron los abogados defensores.
Rozeman, de 56 años, fue encontrado muerto a tiros destrás de un mostrador en su tienda, el 5 de noviembre de 1983. Según los informes, no se halló el arma homicida y no hubo testigos del crimen.
En 1984, un jurado completamente integrado por personas en su totalidad blancas encontró culpable a Ford, un afroamericano, y recomendó la pena de muerte.
El jueves de la semana pasada, los fiscales presentaron una petición para anular la condena y la sentencia de Ford, argumentando que a finales de 2013 recibieron "evidencias creíbles" de que el reo no estuvo presente en el momento del robo ni involucrado en el asesinato de Rozeman, el 5 de noviembre de 1983. El joyero tenía 56 años y había contratado ocasionalmente a Ford para realizar trabajos de jardinería.
Este caso ha dado argumentos a los grupos que luchan contra la pena de muerte en Estados Unidos. La ONG Amnistía Internacional (AI) ha subrayado además una posible discriminación por el hecho de que Ford sea negro. 
La ley de Luisiana establece que los reos que han cumplido condenas y luego han sido exonerados tienen derecho a una indemnización. La norma ordena el pago de 25.000 dólares por cada año de encarcelación injusta, hasta un máximo de 250.000, más otros 80,000 dólares por la pérdida de "oportunidades de vida".