EE.UU. contra Cuba: fuerza para respaldar la retórica

Publicado el 31 octubre 2012 por Norelys @norelysmorales

Norelys Morales Aguilera.- La política de Estados Unidos, ya se sabe, está basada en la fuerza que sustenta la retórica sobre "democracia", "derechos humanos" y otros asuntos, según convenga a la elite que delinea sus llamados intereses nacionales.

Tras los llevados y traídos discursos de cambio hacia Cuba, la política estadounidense se sostiene en el tiempo y no importa qué nuevo aplique la Isla si mantiene su Revolución a contrapelo de sórdidos rejuegos que en verdad no tienen que ver con la real conveniencia para EE.UU.

Los hechos lo confirman desde 1959 hasta hoy. "No existe una oposición política efectiva en Cuba; por tanto, el único medio previsible que tenemos hoy para enajenar el apoyo interno a la Revolución, es a través del desencanto y el desaliento, basados en la insatisfacción y las dificultades económicas. Debe utilizarse prontamente cualquier medio concebible para debilitar la vida económica de Cuba. Negarle dinero y suministros a Cuba, para disminuir los salarios reales y monetarios, a fin de causar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno".

Esto lo escribió el 6 de abril de 1960, Lester Dewitt Mallory, quien se desempeñaba como subsecretario de Estado adjunto para Asuntos Interamericanos, en un memorándum secreto al presidente John F. Kennedy con una propuesta analizada en una reunión de altos cargos.

Pero, de vez en cuando aparece algún personaje en Estados Unidos que "enmienda" la política. En un informe, titulado "United States Security Policy Implications of a Post-Fidel Cuba" (Implicaciones de una Cuba post-Fidel para la política de seguridad de Estados Unidos), se advierte que los manejos hacia la Isla perdieron hace ya mucho tiempo su "efectividad" e "iniciativa creativa", comenta el periodista Tracey Eaton en su blog Along the Malecon.

Firmado por el comandante Carlos A. Iglesias de la Fuerza Marítima estadounidense el documento de 44 páginas, divulgado por el Servicio de Información Técnica Nacional (NTI, por sus siglas en inglés) del Departamento de Comercio de EEUU y fechado el pasado tres de octubre, señala que los esfuerzos para derrocar al régimen cubano y apoyar al pueblo de la Isla han resultado "contraproducentes", pues tras cada acción acometida por EEUU el "Gobierno revolucionario" ha salido "más fuerte y atrincherado políticamente".

Mezquino ojo avizor, el oficial advierte que los cambios recientes en Cuba dan paso, por primera vez, a oportunidades "únicas" para hacer progresar los objetivos de la seguridad nacional estadounidense respecto a la Isla.

Si se desea un ejemplo de la retórica apoyada en la fuerza, la tozudez y la inutilidad, están las transmisiones de la TV que no se ve hacia Cuba: TV Martí, que recientemente organizó un despliegue para "que los cubanos vieran" un debate presidencial entre Barack Obama y el candidato republicano Mitt Romney, pero las expectativas de sus directivos no se cumplieron.

En Miami el director de la Oficina de Transmisiones a Cuba (Office of Cuba Broadcasting), Carlos García Pérez indicó a la agencia de prensa AP, que la transmisión fue diseñada para que a través de la señal de Mega TV, que llega a la isla por el sistema DirectTv "los cubanos pudieran conocer ejercicio de la democracia y cómo funciona en Estados Unidos".

Explicó que para que los cubanos se enteraran de la transmisión realizaron una promoción a través de correos electrónicos, mensajes de texto, radio y televisión, pero nadie consultado por AP recibió tampoco ningún aviso. Gasto de dinero y politiquería.

Otro indicador de la retórica tras de la fuerza es la Ley de Ajuste Cubano que establece que cualquier cubano llegado a territorio norteamericano, sin reparar en formas y métodos empleados para ello, que viva allí durante un año, puede recibir del Fiscal General (en la práctica las autoridades de inmigración), la condición de Residente Permanente en Estados Unidos. Un "soy cubano perseguido" basta.

Pero, los cambios a la Ley Migratoria cubana han descolocado a Washington y han puesto la bola en su cancha. El Gobierno de Estados Unidos se congratuló de la reforma migratoria anunciada en Cuba, pero advirtió de que puede ocasionar "cambios" en el flujo migratorio desde la isla y pidió a los cubanos que "no arriesguen sus vidas" en el mar.

¿Están previendo que los cubanos a quienes niegan sus visas los vayan a abrumar y algunos mantengan el interés de acogerse a la Ley de Ajuste cubano que da residencia automática al cubano que toque tierra norteamericana, como no sucede con otro extranjero?

"Estamos viendo la posibilidad de que los cambios a las regulaciones de visas de salida de Cuba puedan causar un cambio en los patrones de migración desde Cuba. Le recordaremos a la gente que no arriesgue sus vidas al emprender viajes peligrosos por mar", dijo William Ostick, portavoz para el Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.

"Por supuesto, aún sin visas de salida, serán requeridas visas de entrada por casi todos los países en la región", agregó.

Otro galimatías que los medios distorsionan bajo el presupuesto beneficioso a Estados Unidos de la retórica tras la fuerza.| Publicado en Cubahora