En el año 1535 el parlamento inglés confirma la supremacía eclesiástica de Enrique VIII, es decir, a partir de la fecha los monarcas ingleses son los jefes de la Iglesia en su país. La creación de la Iglesia Anglicana vino de la necesidad (por mis cojones) de la anulación del primer matrimonio de Enrique VIII para poder casarse con Ana Bolena ante la negativa del Papa de Roma.