23 de Febrero de 1484
La ciudad de Segovia acudió a Isabel la Católica dándole a conocer el mal estado en que se encontraba el Acueducto, cuyas aguas se despeñaban desde la altura por tener roto el canal, siendo de exposición constante el paso por aquel sitio y para las casas próximas el desprendimiento de grandes masas al verificarse el deshielo, disminuyendo por tales motivos el agua en la población, y temiéndose la destrucción de tan magnífico edificio de continuar las cosas en tal estado; asímismo la indicaban que otras fuentes de la ciudad y su tierra necesitaban también reparación, pidiéndola permiso para hacer un reparto entre los habitantes de la ciudad y los pueblos para allegar fondos con que sufragar estos gastos.
La Reina católica mandó en cédula dada en Santo Domingo de la Calzada a 26 de Agosto de 1484, que Fray Pedro de Mesa, Prior del Monasterio de santa María del Parral, informase sobre la solicitud de la ciudad de Segovia, el cual, en unión de Juan Guas y otros maestro y de dos regidores de la ciudad, evacuó el informe, y visto por los Reyes Católicos, despacharon otra real cédula desde Tarazona, el 23 de Febrero de 1484, ordenando a dicho Fray Pedro de Mesa, al licenciado Quintana-Palla, canónigo de la iglesia mayor de Segovia; al doctor Puebla, corregidor de la misma, y al doctor maestre Juan de Guadalupe, que todos juntos escogiesen los medios para hacer las obras, autorizándoles, si era necesario, echar alguna sisa, hacerlo sobre la carne que aquel año estaba a precio bajo, con respecto a la ciudad y arrabales, y para hacer el repartimento de los maravedises que se habían de cobrar, tanto respecto de la ciudad como de los pueblos, y con la condición precisa que el dinero recaudado había de ir a parar y ser distribuído por el Prior del Parral.
Aceptada la comisión, impuesta la sisa sobre la carne a razón de una vieja blanca por libra de cuarenta onzas, y hecho el repartimento, comenzaron el 12 de Mayo de 1484 y bajo la dirección del Arquitecto Fray Juan de Escobedo, religioso del Parral, las obras de reedificación del Acueducto, continuando todas las que se hicieron bajo la misma dirección, y acabándose el año 1489, en cuyo año, el 30 de abril, Fray Gonzalo de Frías, que había sucedido en el priorato del Parral y en la comisión de las obras a Fray Pedro de Mesa, fallecido en 1485, y Fray Juan Escobedo presentaron a Isabel la Católica las cuentas de lo gastado en el Acueducto, puente de Oñez, de la Dehesa, de Santa María del Parral, de Bernardos, del Espinar, de Guijas albas, Del Soto, de la Puente Seca, algunas de las cuales se hicieron de nuevo, en el cubo de la puerta de Santiago y otras, terminando desde aquel día la sisa de la carne.
Somorrostro.
El Acueducto y otras antiguedades de Segovia.
Segovia, 1861.
Pedro Sainz López
Valtiendas, 20 de Febrero de 1899El Adelantado de Segovia, núm 1252
23 de febrero de 1899.
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