Título original: New in Town
Director: Jonas Elmer
Guionistas: Ken Rance
C. Jay Cox
Intérpretes: Renée Zellweger
Harry Connick Jr.
Nathan Fillion
Siobhan Fallon
Frances Conroy
J. K. Simmons
Mike O’Brien
Productores: Paul Brooks
Tracey E. Edmonds
Phyllis Laing
Andrew Paquin
Peter Safran
Darryl Taja
Fotografía: Chris Seager
Música: John Swihart
Montaje: Troy Takaki
Nacionalidad: Estados Unidos Canadá
Año: 2.009
Duración: 97 minutos
Edad: 13 años
Género: Comedia, Romántica
Distribuidora: Zeta Audiovisual, S. A.
Estreno: 19-06-2.009
Página WEB: Web Oficial de la película en España
Web Oficial de la distribuidora en España
Tráiler de la película en YouTube
Calificación:
Crítica: 5,316 Espectadores: 140.493
Vizcaya: 5,061 Recaudación: 810.097,50 €
España: Puntos (Popularidad):
Rugoleor: Índice de popularidad:
Sinopsis:
Lucy Hill es una ejecutiva ambiciosa con mucho futuro que vive en Miami. Adora sus zapatos, adora sus coches y adora subir puestos en el escalafón corporativo. Cuando le ofrecen un puesto temporal lejos de su ciudad para reestructurar una fábrica, acepta inmediatamente sabiendo que un gran ascenso no anda muy lejos. Lo que empieza siendo un trabajo sencillo acaba siendo una experiencia que le cambiará la vida ya que Lucy va a encontrar un mayor sentido a su existencia y también, de forma imprevista, al hombre de sus sueños.
Comedia romántica al servicio del choque cultural entre el campo y la ciudad, y con un guiño a la crisis. Renée Zellweger es la ejecutiva del título, que de Miami tiene que viajar al helado Medio Oeste para llevar a cabo la reestructuración de una fábrica. Ahí conocerá a Harry Connick Jr., y saltarán chispas. Tras el glacial recibimiento, llegará el deshielo, su progresiva aceptación por la comunidad y, finalmente, el dilema, cuando sus superiores le ordenan echar el cierre.
Crítica:
22.06.2009 – JOSU EGUREN
Fuera de sitio
Decía Godard que ‘todo lo que necesitas para hacer una película es una chica y una pistola’, aunque existen alternativas menos violentas como la de hacer girar toda una historia en torno a un personaje desubicado. Esta segunda opción es una de las preferidas por los guionistas de corte clásico, especialmente cuando se trata de invocar la comicidad subrayando el choque cultural entre la urbe y el campo, y sigue un patrón que lleva demostrando su eficacia desde los años 20. Heredera del personaje interpretado por Diane Keaton en la pseudocomedia rural “Te quiero, Baby”, Renée Zellweger emprende con “Ejecutiva en apuros” su particular descenso a los infiernos del campo, aunque lo hace tropezando una y mil veces en la primera escalera. Sin el báculo de Virgilio, en fuga, Zellweger se apoya en el brazo de un ¿director?, Jonas Elmer, que economiza el gasto destinado a originalidad y talento quizá porque fía todo el éxito de la función a las dotes para el desparrame cómico de la conocida actriz americana.
Llámenlo 'slapstick' o caídas de culo elevadas al cuadrado, lo cierto es que “Ejecutiva en apuros” no es otra cosa que un cúmulo de situaciones cómicas interpretadas por el reflejo escuálido de Bridget Jones en modo de piloto automático. Supongo que Renée Zellweger ha elegido esta historia al azar de entre la montaña de guiones que le han propuesto para reinterpretar a una neurótica treintañera, adicta a la nicotina y afectada por el sobrepeso, pero con dos tropezones más corre el peligro de acabar como Bela Lugosi, internada en un pabellón psiquiátrico y dando gritos por los pasillos con unas bragas extragrandes en la cabeza. De momento, todavía nos hace reír, aunque la manden a un pueblo inhóspito de Minnesotta a enamorarse de Harry Connick Jr., poca pieza para una actriz tan dotada para la comedia.
Todo hubiese mejorado mucho si Jonas Elmer hubiese enfocado un poquito más a ese coro de bucólicos pastorcillos que adornan el belén en segundo plano, y en especial a J.K. Simmons, un profesional que sale bien parado de esta romería campestre.