Además, un 30% cree que su endeudamiento es demasiado elevado en relación con sus ingresos. Los hogares españoles son los que se encuentran bajo mayor presión, mientras que en el otro extremo sólo un 3% de los encuestados de los Países Bajos afirma tener problemas para pagar sus préstamos y sólo el 7% considera que su deuda es muy alta.
Los resultados de la encuesta muestran un predominio del sentimiento pesimista, ya que un 32% de los encuestados cree que la situación empeorará aún más en 2011 frente al 28% de los hogares europeos.
El año pasado los consumidores creían haber dejado atrás lo peor de la crisis crediticia pero los resultados de este año muestran que este optimismo ha desaparecido debido a la lenta salida de la recesión, particularmente en el sur de Europa.
Este deterioro en la confianza financiera se refleja en los Indicadores de Bienestar Financiero (IFW) que Janus Capital ha incorporado a la edición de este año y que clasifican los países puntuando sus actitudes respecto a los siguiente parámetros: seguridad financiera, ahorro y patrimonio, jubilación, acceso al crédito y bienes inmuebles.
Según estos criterios, los Países Bajos ocupan el primer lugar del ranking, con una puntuación de +45 en los IFW, seguido por Alemania, Reino Unido, Francia e Italia, mientras que España se sitúa en el último puesto con, -50 puntos.
Además, según el estudio existe una tendencia bajista del bienestar financiero, que ha disminuido en casi todos los países encuestados excepto en Alemania, donde vemos una ganancia neta de confianza, contraria a la tendencia.
Francia ha sufrido la caída más grande (23 puntos), debido, en parte, al efecto del drástico programa de reformas económicas y sociales de Sarkozy, que también incluye un aumento en la edad de jubilación.
Las malas noticias también se extienden a los planes de jubilación, ya que la mayoría de los europeos mantienen sus expectativas de jubilarse a una edad media de 63 años, y sin embargo no han llevado a cabo las previsiones financieras adecuadas.
Un 61% de los encuestados europeos cree que no está ahorrando lo suficiente para su jubilación pero en el caso de España este porcentaje aumenta hasta el 71%.