El único jugador que logró que lo llamaran ‘’El 10’’, luego de Diego Armando Maradona, selló su último partido con la camiseta Xeneize. Aquel mago que hipnotizó a sus adversarios y emocionó a sus hinchas, dejó de ser jugador del Club Atlético Boca Juniors. Amado y odiado. ‘’El último diez’’ estuvo en lo más alto del fútbol mundial y supo ser convocado a la selección argentina sin jugar en su club de turno (Villarreal). Ganador de 10 títulos con su institución. Gigante en las difíciles y un genio dentro y fuera de la cancha. Pocos futbolistas lograron capturar de tal manera a los amantes de este deporte en nuesto país.
Con la corriente en contra prometió un nuevo título y cumplió. Comandó el equipo que se coronó campeón en el Apertura 2011, firmando nuevos récords (Invicto, valla menos vencida y mayor diferencia entre el 1° y 2°). Lejos de querer voltear al hombre que lo quiso ver fuera del club años atrás, el ex Barcelona encaminó al Xeneize a una nueva final de Copa Libertadores y puso fin a su ciclo al termino de los 90 minutos en Brasil.
Aunque el Flaco Schiavi, Agustión Orion y hasta el mismísimo Daniel Angelici declararon que intentarán hacer lo imposible para que recapacite su decisión, todo parece sentenciar el cierre de una era. Una era llena de éxitos: La Intercontinental ante el Real Madrid, el caño a Yepes, los goles a River, las tres Libertadores, sus lágrimas ante el Bayern Munich y su pasíon por Boca. Hoy se retira el 10 y ‘’La Boca’’ está de luto. Hoy empieza a nacer la leyenda de Juan Román Riquelme, el último diez del fútbol argentino.