No escribo por mi admiración hacia el director del restaurante sino por un fenómeno que no me había dado cuenta y mi hija me explicó el truco. Al pedir agua - yo sólo bebo agua- te traen una moderna botella azulada de una conocida marca con etiquetas incluidas. Mi hija se dio cuenta de que ya la traían abierta y lo mismo ocurrió con las sucesivas que pedimos. Normalmente el agua, el vino y las demás bebidas te las deberían abrir delante tuyo pero no era el caso. No me atreví a preguntar porqué la traían así pero mi hija, que conoce este mundillo, me aseguró que lo más probable es que con "arte" las abiertas se iban rellenando sucesivamente con agua de la despensa -probablemente de la misma marca, eso sí- hasta el deterioro de la botella. Con este "método" consiguen cobrar una botella de agua nueva cuando en realidad no lo es. Un "plus", vamos.
Ya sé que estamos en crisis y cada uno rasca por donde puede; me parece un truco sutil. Lo único que me preocuparía es que con la excusa de la "botella bonita" y de color como la Solan de Cabras te la rellenen con otra de condiciones insalubres - lo digo por los bebés y la preparación de biberones.