Es innegable la influencia que ha tenido el presidente venezolano en el resto de las naciones latinoamericanas y ciertamente no fue un presidente perfecto (eso no existe, no sean ilusos) pero no se puede negar que Venezuela cambió para siempre. Si es para bien o para mal, es algo que se decidirá cada día, a cada instante, con cada paso que den los venezolanos. Durante su gobierno hubo cambios en salud, educación, cultura y diversas políticas sociales… No se le puede achacar a Chávez que no lo haya intentado, por un lado, y por el otro un gobierno no es una persona, es un pueblo: a distintos niveles todos los ciudadanos son responsables de la construcción de su país.
Ahora llega otro cambio, del que ya no se podrá culpar a Chávez, pero no importa: siempre habrá alguien a quien culpar.
Y nosotros, aquí, hablando del alcalde de nuestro pueblo.
El Estafador #158, el alcalde de mi pueblo.