La regla por la que una determinada página aparece la primera ante una determinada búsqueda. La unidad mínima por la que se complementan más de 200 criterios de posicionamiento que congrega el famoso y cambiante algoritmo llamado PageRank. Todo el mundo que opera en Internet quiere ser el primero por determinadas palabras clave. En juego hay mucho dinero y millones de visitas que también se pueden monetizar. Cuantos más enlaces apunten a tu site (o páginas específicas) más posibilidades tendrás de ocupar posiciones privilegiadas en el buscador. Un oficio, miles de profesionales, una nueva forma de hacer publicidad, enriquecimiento de los departamentos de marketing convencionales… son solo algunas de las cosas con la que Google ha conseguido revolucionar, modificar e, incluso, mejorar en todos los mercados.
Hay una realidad social completamente nueva, socializando las búsquedas se abren nuevas ventanas en la satisfacción del usuario y en las del modelo de negocio. Pero el algoritmo tiende a humanizarse por relevancia social y menos por el valor y cantidad de enlaces que te apuntan. Eso sí, una cosa no anula la importancia de la otra y todo sigue conectado. Ese es el valor del algoritmo de Google y su capacidad de adaptación a los nuevos hábitos de consumo en la red.
Es casi paradójico, ver como algo frío y matemáticamente calculado, ahora debe someterse al criterio social; pocos habrían imaginado este giro hace unos años y aquellos que se han resistido al twitter, tuenti, facebook o cualquier red social, finalmente van a sucumbir ante el empuje arrollador de estos fenómenos.