Leo por doquier cosas sobre "el alma de los vinos" y me preocupo. No tanto por lo que tiene de positivo, que por una vez lo que es un hecho para unos pocos se vuelva normalidad para todos los demás, sino mas bien por en boca (o tecla) de quien leo esto de "el alma" de los vinos y a santo de que y en que contexto..etc.
Otra cosa es otra cosa. Me ha gustado algo en la lectura de este enlace a un articulo de Meritxel Falgueras para su blog en la pagina de la SER. No es mi estilo, no me mal interpreten, pero me ha gustado esta frase final "El vino perfecto no existe, aunque tal vez no nos gustaría. El vino, como las personas, nos gusta o no por lo que es, no por el análisis de sus propiedades si no por su autenticidad" Correcto para mi, al menos para describir al vino que me gusta. Y a las personas que me gustan.
Un tipo que parece sincero es mi tocayo Xosé Luis Sebio, enólogo de Coto de Gomariz. Sebio tiene buenos amigos en el colectivo bloguer y es por ello por lo que sus palabras en el blog que regenta (Viños de Encostas) deben ser situadas en el margen de la confianza en los que leen, bloguers la mayoría. No son, o al menos yo no las interpreto, como un ataque a este modo de opinión publica. Porque esto, para quien aún no lo haya entendido, es la opinión publica. Con mayúsculas.
Así que, hecho este matiz, debo manifestar mi malestar (flojito eh) con lo de "La labor de los bloguers en el mundo del vino. ¿Necesarios o un mal del mundillo vitícola?. No. De mal nada.
Tal vez el prisma de algunos bloguers pase por su cuenta corriente y el de otros carezca de sentido critico (o de ganas de meterse en líos) pero que la opinión publica es necesaria y cuanta mas (y libre) mejor es impepinable. Otra cosa es el daño que ciertos bloguers puedan hacer a ciertos vinos, una afectación en la que por cierto estoy totalmente en desacuerdo. Estamos muy lejos, aunque algunos crean lo contrario, de ver que las ventas de tal o cual vino caen por la opinión que uno, cien o mil bloguers tengan sobre ese vino. Si algo así sucediese, tengan por seguro que volarían las querellas y las amenazas. Vamos, no lo duden ni un segundo.
Y ya puestos, ¿quien estaría en posesión de "la verdad" (si tal cosa existiese)?. ¿El ingeniero, el periodista o el artista/religioso?. ¿O ninguno?.
A lo mejor, la verdad en esto del vino la tiene la levadura ML01, o la Y3079. O la D254. O las enzimas. O la ósmosis inversa. Quien sabe, la verdad suele ofrecer caras muy dispares dependiendo de quien mire. Abran la prensa cada día y verán tres países distintos. O cuatro, si leen La Gaceta.
Creo que se habla con mucha facilidad de alma sin dar nada a cambio. La salud, por ejemplo. Dar la salud a cambio de... nada. Solo por ser capaz de sentir lejanamente a que se refieren cuando dicen que un vino les cambió la vida. ¿Donde está el alma de un vino?. ¿En la viña, en la bodega, en las manos del viticultor, en la probeta del enólogo?. ¿Cuantos vinos tienen alma?, ¿todos?. ¿Solo los no comerciales, los de verdad?. ¿Un viticultor/vinicultor/enólogo sin alma puede hacer vinos que la tengan?. ¿Por qué?. Y lo mas importante, ¿le importa a alguien todo esto, o al final todo se resume en precio-valor-moda-merchandising?
Yo no me atrevo a decidir si algún vino tiene alma o si los bloguers son solo una banda de niños malcriados con mucho tiempo libre. Me conformo con que se acuerden de mi cuando me vean. Eso ya es un logro. Incluso cuando es para mal. Por algo será, ¿no?.
*Fotos de mi autoría situadas con animo puramente decorativo.