¿Conoces el síndrome de Estocolmo? Es cuando un prisionero termina ayudando a sus captores y se convierte en cómplice… bueno, pues aquí estoy… hablando justamente de ese tema en la vida de esta APV… a quien llamaré Perseverante APV, pues es firme cuando se trata de ser fiel a su especie.
Resulta que esta Perseverante APV se hizo novia de un tipo de la peor calaña posible… todo aquel a su alrededor con medio milímetro de cerebro en su cabeza le dijo que estaba completamente loca… intentaron, por todos los medios, de hacerle entrar en razón para que botara a la muestra de hombre que tenía por ‘peor es nada’…