Cuando hablamos de amor, pensamos en un sentimiento muy fuerte el cual puede cambiarte completamente en cuestión de segundos, por eso quiero contaros la experiencia de un “amigo”.
Pensemos en el verano, días soleados, se acabaron las clases, todo el mundo quiere disfrutar con sus amigos y familia de las vacaciones. Pero nuestro protagonista lo odia, el calor incesante, demasiada gente, una persona con muy mala actitud sobre su entorno. Supongo que por lo solo que se siente o que en su vida la palabra amor nunca estuvo.
Sus padres le ofrecieron (obligaron) a ir con ellos de viaje a su ciudad natal a visitar a la familia que todavía reside allí, para él no era su verano deseado, pero que podría hacer, no le quedaba de otra. Al final no le pareció tan mala idea, asique se hizo a la idea de disfrutarlo.
El viaje fue largo, caluroso y bastante aburrido por no resaltar el agobio que había en el coche. Pero eso no fue nada, pensó que mereció la pena al ver a su abuela con esa sonrisa de lado a lado. Nadie sabía lo que ese viaje supondría y el cambio que haría en su ser.
Los días no iban a pasar así de rápido, asique se propuso estar con su abuela para ayudarla en todo momento, es lo normal ella se lo merecía y mucho más que eso, aun así los días eran largos y calurosos quien lo iba a decir calor en verano.
La felicidad se apoderaba de el poco a poco quedaba menos para volver, lo que él no sabía es que ese mismo día encontraría una persona muy especial. La mañana se planteaba interesante era el cumpleaños de su tía e iban a ir a una barbacoa. En ese mismo cumpleaños conoció a una chica era preciosa, amable, graciosa y sobretodo divertida ese día disfruto como nunca, ese primer beso que se dan dos personas que conectan en un instante es algo mágico, pero no todo iba a ser felicidad.
Como bien había dicho quedaba poco para la vuelta, el estaba triste de dejar a esa chica, pensaba si la acabo de conocer por qué me pasa esto, pero el destino nunca se equivoca. Esos últimos días se vieron todo lo posible para disfrutarlos ella estaba muy triste de perder tan buen chico.
Se prometieron llamarse todos los días, el la llamo ese mismo día que llego a su casa y ella contesto después de una charla algo extraña como si no tuviera que ser mantenida ella se despidió con la promesa de que llamaría.
Pero lo triste es que nunca volvió a llamar, ya había encontrado a otro, entonces el reventó en ira, pensaba cómo es posible que una persona sea capaz de hacérselo a otra, esto lo sumió en la miseria y desde entonces ha perdido la confianza y se resguarda en la escritura.