El Antihumanismo Como Política de Estado: Cuando Gobiernan los Trolls

Publicado el 07 agosto 2019 por Moebius
Mundo siniestro liderado por garcas, donde no podemos ignorar el papel de Trump en inspirar tiroteos masivos en EEUU. aquí, vivimos en un país amarillo de "planeros" del sistema financiero, tierra rica de trabajadores empobrecidos: el Felino Macri puso al Estado argentino y a sus trabajadores en una precariedad extrema.  Nos siguen pegando abajo, y de todos lados, el gran empresariado quiere que trabajemos gratis y sin horario, como el modelo antihumanista que se está imponiendo en Chile, los ruralistas imponen una niñez envenenada por decreto. "Se están muriendo los pendejos, esta gente se tiene que ir" dice el Indio Solari. Quizás la mejor imagen que nos podamos dar del antihumanista, son los trolls, y quizás por eso sean tan valorados no solo por Corporación Cambiemos sino también por la nueva ola de "pensamiento" que opera en las redes. Aquí, una somera visión sobre el humanismo en el que vivimos.
Un modelo antihumanista se observa en esta Argentina inexplicable, donde ganan los bancos, ganan los acreedores de deuda, y ganan los que tienen saldo positivo de dólares, y pierden trabajadores, jubilados, y actividades productivas. No se sabe por qué el gobierno presenta su modelo como "raíces para el futuro".

La situación económica es mucho más grave de lo que se dice. El merendero Darío Santillán alimenta diariamente a más de 200 personas y actualmente corre riesgo de desalojo; veinte familias se quedarían sin vivienda. Más de 10 mil personas caen en la pobreza cada 24 horas, y "cada hora arroja a la pobreza a 454 personas y a la indigencia a 118", sostiene el informe elaborado por el IPyPP sobre el primer trimestre de 2019. Cuatro millones de pobres y un millón de indigentes más en un año es parte de la catástrofe social que van a dejar de herencia., seguida de un industricidio cierre y empresas sin precedentes.
"...humanizar es salir de la objetivación para afirmar la intencionalidad de todo ser humano y el primado del futuro sobre la situación actual. Es la representación de un futuro posible y mejor lo que permite la modificación del presente y lo que posibilita toda revolución y todo cambio. Por consiguiente, no basta con la presión de condiciones oprimentes para que se ponga en marcha el cambio, sino que es necesario advertir que tal cambio es posible y depende de la acción humana. Esta lucha no es entre fuerzas mecánicas, no es un reflejo natural; es una lucha entre intenciones humanas. Y esto es precisamente lo que nos permite hablar de opresores y oprimidos, de justos e injustos, de héroes y cobardes. Es lo único que permite practicar con sentido la solidaridad social y el compromiso con la liberación de los discriminados sean éstos mayorías o minorías."
Silo
El antihumanismo como política
Llegaron en medio de una fiesta amarillenta, reventando globos, bailando cumbias, repartiendo mentiras, con embustes de todo tipo, arrinconando a los descreídos contra las cuerdas del oprobio y la burla permanente, rompiendo la inteligencia colectiva en mil pedazos, para atragantarnos con estigmas elaborados por un asesor importado. Como la dictadura, Macri cooptó el Estado al servicio de su banda delictiva y su proyecto político económico antihumanista. El nivel de respeto al estado de derecho y la Constitución también es parecido al de la dictadura, es el antihumanismo expresado en la política.
Su mentado proyecto político económico antihumanista lo vivimos todos los días: un tipo de cambio real alto que tiene como contrapartida salarios reales deprimidos. Esto significa que si el dólar sube mucho y le gana a la evolución de la tasa de inflación en forma constante, el poder adquisitivo de los trabajadores se reduce. El comportamiento de la economía argentina desde hace varias décadas ilustra que ése es el saldo en el vínculo entre dólar-salario.
Resulta perturbador es que exista un amplio consenso entre economistas que asegura que se necesita un dólar caro para impulsar las exportaciones. Esto significa que para conseguir dólares, cuya escasez es uno de los principales motivos de las crisis cíclicas, los trabajadores deberían aceptar pérdidas en la capacidad de compra de sus ingresos.
Eso es el antihumanismo expresado en el campo económico. Devaluación que anuncia más tarifazos y suba de alimentos. El modelo no cierra ni en sus propios términos.
No sólo un endeudamiento feroz
La extraordinaria toma de deuda en moneda extranjera hizo que el de Macri fuera el Gobierno con la mayor disponibilidad de divisas de la historia argentina. El volumen de la deuda adquirida por el macrismo no tiene parangón en la historia. La deuda contraída en los tres primeros años equivale a un Plan Marshall en valores actuales (120.532 millones de dólares).  En Europa, el Plan Marshall sirvió para reconstruir su infraestructura, su capacidad productiva y para fortalecer su Estado de Bienestar tras la II Guerra Mundial. En cambio en Argentina, a pesar de tal nivel de endeudamiento, en estos años la economía se contrajo un -2% acumulado; los precios obtuvieron una subida de 168,9%; el desempleo aumentó hasta un 10,1%; y la pobreza se incrementó hasta el 32%.
De acuerdo a estimaciones de CELAG, en estos tres años, la economía argentina desperdició hasta unos 3.985 mil millones de pesos por el mal manejo de divisas. Equivale al costo de construir hasta 5.756 hospitales, 32.217 escuelas, o hasta 31 años de Asignación Universal por Hijo. En términos de empleo, no sólo no hubiese caído el nivel de ocupación sino que se podrían haber creado hasta 130 mil puestos de trabajo nuevos".
Pero allí no termina la locura financiera amarilla: el pago de intereses de las LELIQ y la Deuda iguala a todo el gasto del Gobierno Nacional, toda una bomba financiera que en algún momento va a estallar.
"Un negocio increíble para los bancos y la especulación financiera, Máxime si uno recuerda que el motivo del desguace y privatización de la red de ferrocarriles argentinos, eran porque generaban un déficit de un millón de dólares por día. Registrándose actualmente un pago de intereses equivalentes a 44 redes de ferrocarriles. O si lo relacionamos con un icono de la corrupción como lo del Sr. Lopez revoleando bolsos, las LELIQ serían un revoleo desde el Banco Central a los bancos equivalente a 5 veces por día lo del Sr. Lopez, durante todos los días y todos los meses. O sea una lesión al erario público casi dos mil veces mayor. Sin embargo, nada de ello lo refleja la gran prensa y los medios, permitiendo que los elefantes pasen por la puerta del bazar sin que la opinión pública se escandalice".
Mario Cafiero - Ingeniero industrial – ex diputado nacional
Según la Encuesta Permanente de Hogares del Indec, sobre una población urbana de 40.500.000 personas, hay 13.800.000 pobres, con un aumento en 12 meses de 3.600.000 nuevos pobres. De esos totales, los indigentes urbanos suman 2.900.000, con un incremento de casi un millón de nuevos indigentes. Si esos mismos porcentajes se proyectan a toda la población, incluyendo el sector rural, hay poco más de 15 millones de pobres, los cuales 3,5 millones son indigentes.
A medida que las fuerzas que moviliza el gran capital van asfixiando a los pueblos, surgen posturas incoherentes que comienzan a fortalecerse al explotar ese malestar canalizándolo hacia falsos culpables. En la base de estos neofascismos está una profunda negación de los valores humanos. También en ciertas corrientes ecologistas desviatorias se apuesta en primer término a la naturaleza en lugar del hombre. Ya no predican que el desastre ecológico es desastre, justamente, porque hace peligrar a la humanidad sino porque el ser humano ha atentado contra la naturaleza. Según algunas de estas corrientes, el ser humano está contaminado y por ello contamina a la naturaleza. (...) No es necesario extenderse demasiado en la consideración de las derechas como instrumentos políticos del Anti-humanismo. En ellas la mala fe llega a niveles tan altos que, periódicamente, se publicitan como representantes del “Humanismo”. En esa dirección no ha faltado tampoco la astuta clerigalla que ha pretendido teorizar sobre la base de un ridículo “Humanismo Teocéntrico” (?). Esa gente, inventora de guerras religiosas e inquisiciones; esa gente que fue verdugo de los padres históricos del humanismo occidental, se ha arrogado las virtudes de sus víctimas llegando inclusive a “perdonar los desvíos” de aquellos humanistas históricos. Tan enorme es la mala fe y el bandolerismo en la apropiación de las palabras que los representantes del Anti-humanismo han intentado cubrirse con el nombre de “humanistas”.
Silo - El campo antihumanista
Retroceso en los derechos y la información
Este último fin de semana en Neuquén se realizó el XIV Encuentro Anual de la Red PAR, que agrupa a 139 periodistas y profesionales de la comunicación de todas las regiones del país. Tras intensas reuniones emitieron un documento en el que advierten sobre las consecuencias que el modelo liberal en América Latina, y el gobierno del Felino Macri en particular, tuvieron sobre los medios de comunicación. También denuncia el documento el retroceso en materia de derechos adquiridos y garantizados por ley, como el acceso al aborto no punible y la persecución y hostigamiento a periodistas con enfoque en los DD.HH. Aquí pueden leer el documento completo de la Red Par.
Lo cierto es que cada vez tenemos menos libertad de expresión, menos libertad informativa, dejando de lado que últimamente se ha puesto de moda sustituir la saludable expresión ideológica necesaria en toda democracia real por el siempre coercitivo método de aplicar el Código Penal.
Gobernados por los Trolls
Quizás la mejor imagen que nos podamos dar de un antihumanista, es un troll: seres crueles, malévolos y diabólicos de características antropomorfas, humanoides desagradables que habitan en cuevas. Quizás sea la mejor descripción para un gobierno antihumanista...
Podemos ver su crueldad extrema en el trato brindado a una madre (en este caso la artista Inés Estévez, madre de dos nenas con retraso madurativo) dice "No abandonen a nuestros hijos" para sumarse a la convocatoria para pedir por el presupuesto destinado al programa "Incluir Salud". Por ello, recibió múltiples ataques de la trolleada imperante, que emitieron críticas por las redes y tildaron a Estévez de hacer militancia en contra del oficialismo y de convertir su reclamo en una política partidaria. Quizás sea la imagen más representativa de un gobierno anihumanista con alma de troll (tanto por bajar los presupuestos destinados a los más necesitados, como por atacar a quienes protestan por ello).
El trato recibido por los más débiles pinta a una sociedad, a una política, a un partido o a una época. Tomemos el caso de los extranjeros. El DNU 70/2017, sancionado por Macri en 2017, establece  claras violaciones de derechos a los extranjeros. Desde la Dirección Nacional de Migraciones reconocieron que aunque estén violando los Derechos Humanos Internacionales, ellos "hacen lo que la administración les demanda".
La salida al antihumanismo
Me remito a un texto escrito en 1994. Se nota que lo que estamos diciendo no es nada nuevo.
Si hace carne en los pueblos la idea de que (y es bueno repetirlo) no habrá progreso sino es de todos y para todos, entonces la lucha será clara. En el último escalón de la desestructuración, en la base social, empezarán a soplar los nuevos vientos. En los barrios, en las comunidades vecinales, en los lugares de trabajo más humildes, comenzará a regenerarse el tejido social. Éste será, aparentemente, un fenómeno espontáneo.
Se repetirá en el surgimiento de múltiples agrupaciones de base que formarán los trabajadores ya independizados de la tutela de las cúpulas sindicales. Aparecerán numerosos nucleamientos políticos, sin organización central, en lucha con las organizaciones políticas cupulares. Comenzará la discusión en cada fábrica, en cada oficina, en cada empresa.
De los reclamos inmediatistas se irá cobrando conciencia hacia la situación más amplia en la que el trabajo tendrá más valor humano que el capital y en la que el riesgo del trabajo será más claro que el riesgo del capital a la hora de considerar prioridades. Fácilmente se llegará a la conclusión de que la ganancia de la empresa debe reinvertirse en abrir nuevas fuentes de trabajo o derivar hacia otros sectores en los que la producción siga aumentando en lugar de derivar hacia franjas especulativas que terminan engrosando el capital financiero, que producen el vaciamiento empresarial y que llevan a la posterior quiebra del aparato productivo. El empresario comenzará a advertir que ha sido convertido en simple empleado de la banca y que, en esta emergencia, su aliado natural es el trabajador.
El fermento social comenzará a activarse nuevamente y se desatará la lucha clara y franca entre el capital especulativo, en su neto carácter de fuerza abstracta e inhumana, y las fuerzas del trabajo, verdadera palanca de la transformación del mundo. Empezará a comprenderse que el progreso no depende de la deuda que se contrae con los bancos sino que los bancos deben otorgar créditos a la empresa sin cobro de intereses. Y también quedará claro que no habrá forma de descongestionar la concentración que lleva al colapso si no es mediante una redistribución de la riqueza hacia las áreas postergadas.
La Democracia real, plebiscitaria y directa será una necesidad porque se querrá salir de la agonía de la no participación y de la amenaza constante del desborde popular. Los poderes serán reformados porque ya habrá perdido todo crédito y todo significado la estructura de la democracia formal dependiente del capital financiero. Sin duda, éste segundo libreto de crisis, se presentará luego de un período de incubación en el que los problemas se agudizarán.
Silo - Extractos de la presentación del libro "Cartas a mis amigos" en Santiago de Chile en 1994
Y quiero terminar con otro texto, más poético, de Eduardo Galeano, escrito en octubre de 1999 en el que proclamó "El derecho de soñar".
Ya está naciendo el nuevo milenio. No da para tomarse el asunto demasiado en serio: al fin y al cabo, el año 2001 de los cristianos es el año 1379 de los musulmanes, el 5514 de los mayas y el 5762 de los judíos. El nuevo milenio nace un primero de enero por obra y gracia de un capricho de los senadores del imperio romano, que un buen día decidieron romper la tradición que mandaba celebrar el año nuevo en el comienzo de la primavera. Y la cuenta de los años de la era cristiana proviene de otro capricho: un buen día, el papa de Roma decidió poner fecha al nacimiento de Jesús, aunque nadie sabe cuándo nació.
El tiempo se burla de los límites que le inventamos para creernos el cuento de que él nos obedece; pero el mundo entero celebra y teme esta frontera.
Milenio va, milenio viene, la ocasión es propicia para que los oradores de inflamada verba peroren sobre el destino de la humanidad, y para que los voceros de la ira de Dios anuncien el fin del mundo y la reventazón general, mientras el tiempo continúa, calladito la boca, su caminata a lo largo de la eternidad y del misterio.
La verdad sea dicha, no hay quien resista: en una fecha así, por arbitraria que sea, cualquiera siente la tentación de preguntarse cómo será el tiempo que será. Y vaya uno a saber cómo será. Tenemos una única certeza: en el siglo veintiuno, si todavía estamos aquí, todos nosotros seremos gente del siglo pasado y, peor todavía, seremos gente del pasado milenio.
Aunque no podemos adivinar el tiempo que será, sí que tenemos, al menos, el derecho de imaginar el que queremos que sea. En 1948 y en 1976, las Naciones Unidas proclamaron extensas listas de derechos humanos; pero la inmensa mayoría de la humanidad no tiene más que el derecho de ver, oír y callar. ¿Qué tal si empezamos a ejercer el jamás proclamado derecho de soñar? ¿Qué tal si deliramos, por un ratito? Vamos a clavar los ojos más allá de la infamia, para adivinar otro mundo posible:
el aire estará limpio de todo veneno que no venga de los miedos humanos y de las humanas pasiones; en las calles, los automóviles serán aplastados por los perros;
la gente no será manejada por el automóvil, ni será programada por la computadora, ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor;
el televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia, y será tratado como la plancha o el lavarropas;
la gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar;
se incorporará a los códigos penales el delito de estupidez, que cometen quienes viven por tener o por ganar, en vez de vivir por vivir nomás, como canta el pájaro sin saber que canta y, como juega el niño sin saber que juega;
en ningún país irán presos los muchachos que se nieguen a cumplir el servicio militar, sino los que quieran cumplirlo;
los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo, ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas;
los cocineros no creerán que a las langostas les encanta que las hiervan vivas;
los historiadores no creerán que a los países les encanta ser invadidos;
los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas;
la solemnidad se dejará de creer que es una virtud, y nadie tomará en serio a nadie que no sea capaz de tomarse el pelo;
la muerte y el dinero perderán sus mágicos poderes, y ni por defunción ni por fortuna se convertirá el canalla en virtuoso caballero;
nadie será considerado héroe ni tonto por hacer lo que cree justo en lugar de hacer lo que más le conviene;
el mundo ya no estará en guerra contra los pobres, sino contra la pobreza, y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra;
la comida no será una mercancía, ni la comunicación un negocio, porque la comida y la comunicación son derechos humanos;
nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión;
los niños de la calle no serán tratados como si fueran basura, porque no habrá niños de la calle;
los niños ricos no serán tratados como si fueran dinero, porque no habrá niños ricos;
la educación no será el privilegio de quienes puedan pagarla;
la policía no será la maldición de quienes no puedan comprarla;
la justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, bien pegaditas, espalda contra espalda;
una mujer, negra, será presidenta de Brasil y otra mujer, negra, será presidenta de los Estados Unidos de América; una mujer india gobernará Guatemala y otra, Perú;
en Argentina, las locas de Plaza de Mayo serán un ejemplo de salud mental, porque ellas se negaron a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria;
la Santa Madre Iglesia corregirá las erratas de las tablas de Moisés, y el sexto mandamiento ordenará festejar el cuerpo;
la Iglesia también dictará otro mandamiento, que se le había olvidado a Dios: Amarás a la naturaleza, de la que formas parte;
serán reforestados los desiertos del mundo y los desiertos del alma;
los desesperados serán esperados y los perdidos serán encontrados, porque ellos son los que se desesperaron de tanto esperar y los que se perdieron de tanto buscar;
seremos compatriotas y contemporáneos de todos los que tengan voluntad de justicia y voluntad de belleza, hayan nacido donde hayan nacido y hayan vivido cuando hayan vivido, sin que importen ni un poquito las fronteras del mapa o del tiempo;
la perfección seguirá siendo el aburrido privilegio de los dioses; pero en este mundo chambón y jodido, cada noche será vivida como si fuera la última y cada día como si fuera el primero.

Este texto fue extractado del libro Patas arriba. La escuela del mundo al revés
“Sinceramente” versión Juntos por el cambio 🎈 pic.twitter.com/kMwZvnS1jR— Cristian Cimminelli (@cristiancim) July 30, 2019