El baby led weaning como método de introducción de alimentos

Por Herminia Herminia Herrándiz @mamabambablog

El baby led weaning (BLW) llegó a mi vida ya con mi hijo mayor; aunque, como buena primeriza, lo hizo lleno de dudas y lo utilizamos a medio gas combinándolo con triturados para la alimentación complementaria. Con la llegada del segundo Bamba, el tiempo para preparar comidas diferentes (y cualquier otra actividad) se redujo de forma exponencial; así que, al ver que tenía interés por comer lo mismo que su hermano, no lo dudé y desterré los triturados para ofrecerle comida a trozos desde los 6 meses de edad y lo mismo he hecho con la tercera. B aby Led Weaning no comporta dejar completamente de lado la leche materna ni la artificial, sino que se trata de ofrecerle a tu hijo exactamente lo que come el resto de la familia. Hay muy pocas limitaciones, por ejemplo, nada de miel hasta el año de edad, alimentos con nada o poquísima sal y nada de frutos secos (yo estos los evito hasta los 5 años de edad). Las cosas tipo guisantes mejor aplastarlos antes con el dedo y cualquier alimento que creas que pueda quedarse encajado en el esófago, córtalo antes en cuartos; por ejemplo, las uvas.

¿Cómo funciona?

Cuando los niños cumplen seis meses, son capaces de aguantarse sentados sin ayuda y han perdido por completo el reflejo de extrusión puedes empezar a ofrecer alimentos. Yo recomiendo ofrecer uno nuevo cada tres días para comprobar que no haya alergias presentes.

Cuando le ofrecemos solo comida triturada a un bebé, no suele ser solo un alimento, sino una mezcla de varios y es el adulto quien le lleva la comida a la boca con una cuchara. Con el baby led weaning el niño es capaz de descubrir nuevos olores, gustos, aspectos, texturas y sonidos, lo que les ayuda a estimular el cerebro. Además, el movimiento de masticar refuerza los músculos necesarios para el desarrollo del habla.

Déjame hacer aquí un inciso, mis hijos no solo han comido trozos, sino que también han comido triturados porque considero que es otra textura más a la que deben acostumbrarse, ¡que en esta casa los purés son la cena estrella!

¿Y si no tienen dientes?

Si lo primero en lo que has pensado cuando has leído esto del baby led weaning o de la alimentación complementaria a trozos es que tu hijo no tiene dientes ... Tranquila, no eres la única. Si te quedas más tranquila, deja que tu hijo te pegue un mordisco en el dedo, verás con qué fuerza lo hace, aunque aún no les hayan salido los primeros dientes, puedes empezar con los trozos.

Todas nos asustamos la primera vez que nuestro hijo se atraganta con algo; pero debemos diferenciar entre atragantarse y ahogarse. Atragantarse es completamente normal, es su manera de expulsar el alimento hasta el punto de la boca donde pueden masticarlo sin problemas para después tragárselo. Si te quedas más tranquila, siempre puedes hacer un curso de primeros auxilios para bebés antes de empezar con la alimentación complementaria.

¿Y el tema de las alergias?

Como ya he comentado más arriba; yo aconsejo introducir un elemento nuevo cada 3 días para comprobar que no hayan alergias. Si bien es verdad que estudios recientes han demostrado que la introducción temprana de alérgenos habituales en realidad lo que hace es reducir el riesgo de que el niño sufra alergias (siempre y cuando no haya antecedentes familiares).

Sobre todo, ten en cuenta que los niños menores de 1 año deben alimentarse principalmente de leche materna o artificial; en esta etapa la comida es más una experimentación para ellos. De hecho, entre los que practicamos el baby led weaning se suele decir que "la comida es para jugar" a esta edad.

Si te animas a probar la alimentación complementaria a trozos o el BLW y tienes alguna duda, estaré encantada de respondértela o remitirte a alguien que te la pueda responder. (Y prepara la escoba o un buen mantel para colocar encima la trona porque los trozos acaban por todas partes cuando empiezan).