Julia hace todo tipo de pruebas a Manolito, el pato que encontraron Piti y Burbuja, para conocer su procedencia. Los resultados son claros: hace menos de 12 horas que estuvo en tierra firme. Con las alteraciones magnéticas provocadas por la tormenta, el pato debió desorientarse y acabar en el Estrella Polar. Eso significa que, en cuanto se restablezca la normalidad magnética, será capaz de encontrar de nuevo el camino de vuelta y ellos podrán seguirle hasta encontrar tierra. Sólo hay un problema: Manolito está enfermo y podría no sobrevivir el tiempo suficiente.
De la Cuadra ha dejado olvidada su medicación en el puente de mando y el capitán se apura a recogerla para que no la vea nadie. Sin embargo, Salomé no tarda en encontrarlas mientras ordena. La cocinera conoce bien esas pastillas, son las mismas que le dieron a la mujer del capitán cuando enfermó de cáncer. El capitán, pillado, miente a Salomé y le dice que las pastillas son suyas.
Palomares ha decidió colgar los hábitos definitivamente. La tripulación está conmocionada por esta drástica decisión, todos menos Piti, empeñado en conseguirle una cita cuanto antes. Como Palomares no puede confesar lo que todavía siente por Vilma, miente y dice que es Ainhoa la chica que le gusta. Ulises, conmovido, decide ayudarle a conquistarla. Por su parte, Estela no puede evitar sentirse atraída por Gamboa, aún sabiendo que no le conviene. Ainhoa, para proteger a su amiga, decide convencer a Ulises para que le pida una cita y que así ella se olvide de Gamboa. Ulises acepta la propuesta de Ainhoa a cambio de que ella acepte la petición de Palomares.