En el centenario de la Primera Guerra Mundial es importante conocer algunos de los muchos detalles, curiosidades y anécdotas, que rodearon estos días oscuros de la historia.
Durante el combate en el frente la comunicación telefónica era complicada, porque en las trincheras donde se conectaba habitualmente, se interrumpía el contacto debido a la precariedad del cableado y los ataques. Utilizaban entonces banderas de diversos colores, cohetes, espejos y signos, por ejemplo, para informarse. Como en épocas antiguas también se comunicaban con palomas y otros animales, pero lo más seguro siempre fueron los soldados, llamados corredores, quienes transmitían información de un sitio a otro. Se sabe que Hitler fue uno de ellos, realizaban esta peligrosa tarea en servicio de su nación.
Problemas de Alimentación
Durante los años que duró la guerra se vivieron tiempos de hambre y miseria en los países involucrados, pero los historiadores relatan la desesperación del pueblo austriaco, ruso y alemán, en especial. En las imágenes que se conocen de esta guerra, se suceden los niños con aspecto de desnutrición, que pasaron el llamado “invierno de los nabos alemán” (1916-1917).
Durante este periodo se paralizó el fútbol aunque en Inglaterra si hubo temporada (1914-1915), pero al intervenir el país en la guerra, los jugadores fueron a la lucha y en 1916 ya no se permitió el juego. Una curiosidad era el batallón formado solamente por futbolistas, llamado “Football Batallion”. De este grupo en particular, muchos murieron y otros fueron tomados prisioneros, aunque el káiser propuso un intercambio que nunca sucedió, mientras en prisión no se permitía este deporte.
Deserciones masivas
Como sucede habitualmente en el ejército las deserciones existieron pero fueron reducidas, aunque en Rusia huyeron batallones completos durante el combate. Se argumenta que los soldados rusos tenían una moral muy deteriorada, por lo cual llegaron inclusive a matar a sus superiores. Una de las razones era el maltrato que recibían de los oficiales aristócratas, que tenían a los combatientes como carnaza, según afirman los historiadores. Otros regimientos como los alemanes y franceses también desertaron, estos últimos en 1917 se destacaron por el motín de la primavera, que llevaron a cabo por las condiciones de miseria que atravesaban.
Muerte por Enfermedad
La guerra se cobró nueve millones de vidas, pero muchas de ellas se debieron a enfermedades como pulmonías, tuberculosis o gripes. En ese entonces no existían los antibióticos, motivo por el cual la población se encontraba afectada por ratas o piojos, además de dolencias características de las trincheras. Un dato curioso tiene que ver con las prostitutas, que recibieron condecoraciones, por contagiar a los batallones alemanes con enfermedades venéreas.
Estas son algunas de las muchas anécdotas que acontecieron en la Primera Guerra Mundial, fundamentadas en las investigaciones de los historiadores, que detallan las miserias de una época que se pudo evitar, como los miles de personas que murieron por hambre o enfermedad, además de los innumerables soldados que fallecieron en la injusta lucha.