El Bayern, primer finalista de la 'Champions'

Publicado el 27 abril 2010 por Marianofusco

En el que se presentaba como el encuentro mas importante de toda su historia, el Olympique Lyon se defraudo a si mismo, para acabar desquiciado y a expensas de un voraz Bayern Munich, que se valió de tres tantos consagratorios de Ivica Olic para acceder a la final de la Uefa Champions League.

Serio en defensa y lo suficientemente certero a la hora de enfrentar a Hugo Lloris. Así se mostró un elenco alemán discreto en cuanto a caudal de juego, pero muy bien parado en el campo por su entrenador, un Louis Van Gaal que volverá a una final en la que supo decir presente, con suerte dispar, en dos oportunidades consecutivas, ambas con el recordado Ajax de mediados de los `90.

El espectacular ambiente que se vivía en el Gerland tensionó a ambos conjuntos en el inicio del duelo, lo que llevó a alguna entrada a destiempo e imprecisiones como la de Cris, que al resbalarse en el peor momento y lugar posible, le dejo servido el tanto a Muller, que fallo solo ante Lloris.

El aviso teutón no mermo las ilusiones de un voluntarioso pero deslucido Lyon, que  encontró en un incisivo y ágil Lisandro a su único argumento ofensivo. Por contrapartida, los martillazos los asestaba un equipo “Bávaro” sumamente peligroso al contragolpe.

Esas contras prosperaban gracias a los regalos franceses en la salida del balón, algo que aprovecho muy bien Altintop, quien ratificando la confianza de su entrenador, se transformó en una de las figuras indiscutidas del encuentro. La otra fue Arjen Robben, al que pareció no molestarle la marca personal de Cissokho. De sus pies, de hecho, nació el primer gol, en el que Muller, con un buen pase y Olic, fueron los encargados de asestar el primer gran golpe de la noche.

El duro contratiempo incapacitó a los en lo que quedaba del primer acto y en todo el complemento. Era como si de repente se hubiera reventado la burbuja europea y el golpe hubiera entumecido las piernas francesas, disparando los nervios y dando lugar a errores que en otros partidos se hubieran rentabilizado aun más.

Ante tal panorama, la remontada fue imposible. Los cambios introducidos por  Puel, el de Gomis por Cissokho en el entretiempo no tuvieron el efecto buscado y el Bayern, siempre incisivo, se aprovecho de la situación, dándole realce a una eliminatoria en la que no tuvo rival.

En ese periodo de ostentación, el croata Olic siguió le dio vida a su hat-trick, acercándose a Messi en la tabla de goleadores del certamen con siete goles, uno menos que el argentino. Nueve años después, tras aquella consagración en San Siro, por penales y ante el Valencia de Cupper, el Bayern Munich volverá a disputar una final. Será en Madrid, ante el Inter o el Barcelona.