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La duquesa y el príncipe William acaban de tener a su retoño, apenas el 22 de julio. Y cómo yo he seguido prácticamente todo su desenvolvimiento noviazgo, boda, hasta un artículo hice de su probable no fertilidad, debo quedarme callada. Es Kate Middleton quien a sus 31 años ha tenido a un pequeño de 3 kilos 800 gramos y que al día siguiente salio del hospital a mostrarnos al pequeño.
Los padres se vieron contentos, y la tradición no se dejo para otros días, lo cual no me sorprende. La Monarquía Inglesa aún conserva esos momentos que suenan a medievo pero que llenan de ilusión, magia y sobretodo turistas las islas británicas. A esas horas hace un año moría la pequeña víctima de las drogas Amy Winehouse. Al final Inglaterra es noticia cada año en las mismas fechas.
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Imagen de cuenta de Facebook relacionada con Kate
Un país relleno de contrastes como todos. El pequeñito que se ve será de grande estatura y grandes manos, es el tercer en la línea de sucesión al trono. Y al escribirlo me siento tan extraña porque acostumbrada a las Repúblicas y esas cosas de políticos con democracias (aparentes) que hablar de un rey, una princesa y un pequeño bebé es como de otro tiempo.
Sin embargo, eh aquí lo valorable del asunto y mi concentrar la atención en esta pareja a pesar de representar un dejo geopolítico e histórico. En particular tengo la creencia de "cómo vaya la familia así irá la sociedad" palabras de Juan Pablo II, pues bien, me creo que la familia real cree en la familia tradicional, conforma una pareja de madre, padre e hijo.
Formaron un matrimonio que tardo años en consolidarse como pareja para llegar al altar, sean cual sea los compromisos, esperar un tiempo juntos con esos nuevos papeles y después lanzarse a la aventura de ser padres y procrear. Ahora con un hijo al que orientar.
Me parece un claro mensaje de cómo debe ir la sociedad, cómo debe conformarse una familia, con qué felicidad debe recibirse a un hijo, qué celebrar, qué anunciar. Esta es una imagen, es una representación de lo que prosigue, de lo que es la familia en sociedad. Seguramente no viven un cuento de hadas todos los días (ni las hadas existen) y Kate seguramente tuvo una labor de parto de cerca de 10 horas, así que en diferente manera se viven problemas.
Hagamos y compartamos de la felicidad de este pequeño, con su familia, como una representación de muchos que llevan a cabo todo ese proceso, noviazgo, matrimonio y ser padres felices que festejan, gritan y emocionan con la llegada del nuevo ser a su familia.