A finales del año 2014 ya se anunció que los cabellos grises y platinos eran los tonos estrella del invierno. Sin duda, diversos fenómenos cinematográficos y televisivos, como la popular serie Juego de Tronos, habían popularizado los personajes con cabelleras blancas, plateadas o rubias platino. La decoloración regresaba, con timidez, a los salones de peluquería. Una tendencia que rompía con la coloración predominante de moda durante años.
Algunos pensaron que se trataba de una moda más. Algo pasajero que se desvanecería con el tiempo. Sin embargo, numerosos estilistas, medios de comunicación especializados y firmas de cosmética profesional insisten en que el gris, el plata, el platino, azulados o lilas, rubios hielo o grises combinados con tonos pasteles seguirán dando que hablar durante el 2016.
El pelo gris se debe cuidar para que conserve su aspecto luminoso. Algunos salones y marcas de cosmética ya han empezado a ofrecer servicios y productos dirigidos a esta nueva clientela. En el mercado existen cosméticos para cabellos grises o canosos, decolorantes sin amoníaco, así como hidratantes que revitalizan el pelo tratado. Los fabricantes de pelucas y extensiones empiezan a tener en cuenta, también, este nuevo mercado.
Los gurús de la belleza marcan unas pautas, basándose en las pasarelas y los gustos de la calle. Lo importante de cada tendencia es su efecto dominó. Es decir, cómo va a dinamizar un sector que invierte en innovación y nuevas ideas para generar nuevos servicios y clientes que deseen experimentar cambios.