La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha pedido a los países de todo el mundo una acción más fuerte para combatir el cambio climático y evitar los riesgos que tiene para la salud, y asegura que con medidas fáciles de implantar en el ámbito de las políticas energéticas y del transporte se podrían salvar millones de vidas cada año.
Una actuación en ambos campos, según han destacado en la primera conferencia Mundial sobre Salud y Clima que comienza en su sede de Ginebra (Suiza), tendrían un efecto positivo en las enfermedades relacionadas con los niveles elevados de contaminación, al tiempo que también serviría para reducir los accidentes de tráfico o el sedentarismo.Además, también permitiría a los países estar mejor preparados para luchar contra el impacto del calor extremo, las enfermedades infecciosas o la seguridad alimentaria."La evidencia es abrumadora: el cambio climático pone en peligro la salud humana", ha asegurado Margaret Chan, directora general de este organismo de Naciones Unidas, que recuerda que las soluciones existen pero hay que actuar con decisión para cambiar la tendencia actual".Según los últimos datos, relativos a 2012, en ese año la contaminación atmosférica causó 7 millones de muertes, lo que representa uno de cada ocho fallecimientos a nivel mundial.La OMS y sus Estados miembros han resaltado la importancia de actuar ahora para proteger la salud también a largo plazo, y recuerda que hay algunas enfermedades infecciosas como el cólera, la malaria o el dengue que son muy sensibles al clima y, por tanto, se deben mejorar las medidas de vigilancia y control.Sobre todo porque, según recuerdan, el cambio climático ya está causando decenas de miles de muertes cada año como consecuencia de nuevos patrones de estas y otras enfermedades, que se han visto condicionados por fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor e inundaciones, de la falta de suministros de agua, problemas de saneamiento, o de problemas con las cosechas, según los datos de la OMS.