El cambio continuado como estilo de vida

Por Davidtorne @davidtorne

Desde nuestra juventud desarrollamos una trayectoria que incluye una etapa formativa donde adquirimos unos conocimientos, y una etapa posterior donde los desarrollamos. Hoy en día el proceso es cíclico, las nuevas tecnologías dinamizan – hasta el extremo – el intercambio de información y conocimiento, transforman nuestra forma de trabajar y de producir. Todo ello creando un bucle de innovación continuada que ha convertido el cambio no en algo extraordinario sino en parte de lo cotidiano. La especialización puede no ser una opción tan válida como en tiempos pretéritos. Toman una mayor importancia los skills o habilidades como vía para convertirnos en personas con mayor facilidad de asimilación del cambio.

Hace tiempo que quiero escribir sobre desarrollo personal y hoy me he decidido a compilar todas las anotaciones e ideas sobre el tema en el siguiente escrito. Más allá de la retórica asociada a la autoayuda, el concepto supone una actitud que nos empuja a un proceso de aprendizaje y mejora continua.

Imagen vía Foto Pamp bajo licencia Creative Commons

Teoría y formación

He empezado hablando de las etapas de formación y desarrollo. El primer gran problema es el tipo de formación obtenida. Vivimos en una sociedad sobre raíles, con unas ideas preconcebidas que nos llevan a identificar formación oficial - aquella que viene acompañada de un título del estado – con educación de calidad, aquella que es realmente válida. En un mundo donde el cambio constante es una exigencia, las estructuras encargadas de producir y proveer la formación adecuada no tienen la capacidad de adaptación y asimilación necesaria para cubrir todo lo que se les demanda.

Se obtiene una educación superior - universidad por ejemplo - y ésta sirve como punto de partida para lanzarse al mundo real. Real y no sólo profesional, la educación y las experiencias asociadas en el proceso maduran al individuo y le dan las herramientas para desarrollarse en otras áreas de la vida. Más allá pero, hay necesidades generalistas no cubiertas por el sistema oficial de formación: Crear una marca personal, Networking o cómo crear una malla de contactos, mejorar las habilidades de comunicación y convicción (saber vendernos y negociar) o en un terreno más generalista las finanzas personales: ganar dinero y hacer que éstos trabajen por nosotros. .. Cuestiones a las que tendremos que encontrar respuesta por otros canales.

Nos han educado para realizar un trabajo y unas funciones, pero hemos asimilado que fuera del marco formativo, fuera del que ya hemos aprendido, no somos capaces de ensanchar horizontes y son estos prejuicios los que nos condenan al estancamiento, a hacer las cosas del mismo modo y continuar obteniendo los mismos resultados. Unos resultados que para hacer frente a nuevos problemas y los nuevos paradigmas ya no valen.

¿Pero como ponerme en marcha? ¿Cómo encontrar una solución? Tan sencillo como empezar a conocer el tema: Un libro o un blog pueden ser el primer paso en el área de exploración, puedes seguir aprendiendo con un seminario y si la cosa ves que te motiva y te permite mejorar, buscar un curso que sea consistente. Muchas veces empezamos por el placer de aprender, y lo retroalimentamos con los resultados obtenidos de aplicar el conocimiento a la práctica. Lo que me pasó a mí con GTD y la productividad personal. Cualquier cosa que hagas será más fácil si te motiva y la haces con pasión.

Experiencia, acción y reacción

El conocimiento que se almacena y no se pone en movimiento se acaba perdiendo. Dar el paso significa ponerlo en práctica y asimilar mejor lo que hemos aprendido. Pero la auténtica diferencia reside en superar la resistencia y la incomodidad que supone aplicar algo rompedor. Salir de la zona de comodidad. Si eres tímido y te dedicas a las ventas – combinación explosiva – tarde o temprano tendrás que ¡entrar en combate y tener un cara a cara con el cliente, es en este momento cuando salta la chispa y el conocimiento + la experiencia se transforma en algo más. Obtienes seguridad en ti mismo con lo que haces y con lo que te ves capaz de hacer. Es difícil explicarlo, es como una reacción química donde se combinan varias sustancias y se obtiene una diferente.

Algo que puede no darse en la primera, en este caso sólo queda persistir e intentarlo otra vez. Inspiración y sobre todo transpiración. Para superar los obstáculos, debemos ser capaces de mirar más allá de la pared contra la que nos damos de cabeza, tener claro que queremos sacar, visualizar el éxito y motivarnos para seguir adelante.

Crear una dinámica

Es la sensación que queda cuando triunfas, y correctamente enfocada puede ser el inicio de una dinámica positiva que te lleve a salir regularmente de tu zona de confort. Empezando por hacer cosas nuevas, relacionarte con personas distintas para obtener un feedback distinto al que obtienes habitualmente, reflexionar sobre lo que te provoca incomodidad y cómo puedes superarlo: el ejemplo clásico y tópico de hablar en público, conocer nuevas disciplinas sobre las que no conoces casi nada para sacarte perjuicios de encima: el mundo de la bolsa cambia cuando lees a gente que lo conoce y lo presenta sin el hermetismo habitual. El secreto es identificar el proceso de aprendizaje, puesta en práctica, vencer la resistencia y aprender del error, que se genera cada vez. Una vez superada la incomodidad y generado el mecanismo, el hábito de acostumbrarse a salir de la zona nos será más fácil repetirlo.

Crecimiento personal como vía para ensanchar horizontes, aumentar nuestra confianza en nosotros mismos y generar una mayor predisposición a aceptar el cambio. ¿Sales habitualmente de tu zona de confort? ¿O miras todo esto a cierta distancia, con escepticismo? Me gustaría saber cuáles son tus experiencias sobre el tema, acciones concretas o todo aquello que te hace pensar que esto es sólo humo, sea cual sea tu posición me gustaría que al argumentar en forma de comentario.