-Otro ejemplo de imaginación del autor y, además, atisbos de cierta madurez.-
Género. Narrativa fantástica.
Lo que nos cuenta. Cuatro mil quinientos años después del tiempo de los Heraldos, ahora dioses antiguos, Szeth-hijo-hijo-Vallano tiene el encargo de matar al rey Gavilar Kholin y, cinco años más tarde, Kaladin Benditormenta lucha en una batalla que termina de forma inesperada y le lleva del liderazgo de un pelotón hasta la esclavitud y, finalmente, a los campos de batalla de las Llanuras Quebradas donde será obligado a desempeñar una peligrosísima tarea. Mientras, muy lejos de allí, una mujer trata de obtener explicaciones sobre la figura de los Caballeros Radiantes. Primer volumen de la saga La guerra de las tormentas.
Mi opinión. Novela sobre la que destaco en el titular de la reseña lo de su cierta madurez porque al lector habitual del notoriamente prolífico (e imaginativo) Sanderson no se le debe haber escapado (supongo yo) cierto aire de “juventud” o “jovialidad” o no-sé-bien-cómo-decirlo-pero-espero-que-me-entiendan en su producción general que en este libro tiende (aunque no totalmente) a brillar por su ausencia (para bien, en mi modesta opinión), que además ofrece una sensación de gran magnitud y alcance de la historia (en la escala de la Fantasía, por supuesto) en sus páginas, algo que en otros libros tampoco había normalmente ya que, siendo tramas muy interesantes y realmente entretenidas, eran de un alcance menor (en comparación a este libro, ojo, no en comparación a la Fantasía que se ofrece al lector en las últimas décadas) en cuanto a la propuesta general, con sobrepeso claro pero bien repartido a lo largo del volumen para que no resulte demasiado incómodo, con un autor cuyos puntos fuertes siguen sin ser la narrativa (pero es más que suficiente) ni la construcción de personajes (pero son más que suficientes también), tal vez ni siquiera la trama propiamente dicha (se pude ver en ella unas directrices bastante comunes y conocidas desde lo general, por más que haya que destacar que en esta ocasión el entorno es, por momentos, casi un personaje más) pero sí sigue siendo muy destacado desde la imaginación que ofrece respecto a conceptos que arman la novela y en cuanto a la magia propiamente dicha o a los elementos mágicos que usa, agradable de leer, que no se hace nunca pesada ni densa a pesar de su número de páginas y tan interesante como entretenida.
Destacado. Aunque sea un tomo inicial en la saga, no peca de abundancia de escenas de presentación ni trascendencia relativa y por el contrario suceden muchísimas cosas.
Potenciales Evocados. Alguna que otra idea compartida con “La espada infinita”, pero aparentemente con naturalezas diferentes; aires de La compañía negra pero mucho mejor narrados y con más gancho; por momentos, también algún aire de Malaz pero sin sus problemas narrativos y más cercanía de los personajes al lector.