Pues, sin entrar en detalle y seguramente contra pronóstico, fue Felipe III quien renuncia por el tratado de Oñate a la sucesión de Hungría y Bohemia a favor de la Fernando II. La renuncia no es gratuita, desde luego. Se buscó garantizar el control de Alsacia con el objetivo claro de perpetuar el Camino Español. Es aquí donde ponemos el hincapie porque la constraprestación nos parece que da la medida la importancia que se le daba a esta ruta de provisión: Absolutamente prioritaria.
No era un cualquiera, el tal Vélez, muy al contrario. Gozaba de una altísima consideración por sus excelentes servicios a la monarquía en tierras lejanas durante muchos años. De hecho se pensó en él como posible sucesor del duque de Lerma como valido de Felipe IV (a pesar de que el favorito del rey era Gaspar de Guzmán, Conde-duque de Olivares, enemigo declarado de Vélez). en todo caso ya sabemos quién se llevó el gato al agua...
Pero no nos dispersemos ... El beneficio negociado por el Conde de Oñate era que Fernando II cedía a Felipe III, en Italia, los minúsculos Finale Ligure y Principado de Piombino y, atención, los derechos austríacos a Alsacia. Punto clave de la ruta española a Flandes y unos de los principales desvelos de la monarquía. Alsacia se convertía así en alternativa viable a Lorena para alcanzar los Países Bajos Españoles desde el Franco-Condado.
El tratado, por otra parte, tiene repercusiones a corto plazo. Unas repercusiones debastadoras. Fernando II entra en Bohemia y Hungría como un elefante en una cacharrería y las posiciones obtusas de unos y otros generan el caldo de cultivo de la guerra de los treinta años.
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Pero no adelantemos acontecimientos. Quedémonos con la idea principal que el Tratado de Oñate permitía a la corona española mantener habilitado El Camino Español y construia opciones claras para asegurarlo de cara al futuro. Eso sí, renunció a Hungría y Bohemia (con el encanto que tiene...) pero mantener conectados los territorios de la monarquía era clave, aunque el coste a pagar fuera renunciar a ampliar la monarquía con dos suculentos reinos más.