El carácter en los bebés ¿de donde viene?

Por Celia Garabaya @britishbubbles

Es muy común que hablemos sobre el carácter que identifica a nuestro bebé y más adelante a nuestro niño. Y normalmente nos hacemos muchas preguntas. ¿De donde habrá sacado eso? ¿Por qué es tan cabezón?… Todas estas preguntas tienen unas respuestas muy sencillas. Hoy vamos a intentar analizar todo lo relacionado con el carácter o la personalidad del bebé y del niño. De esta forma, podrás conocer un poco más a tu hijo y entender muchas de sus actitudes que antes no veías lógicas. Analizamos los diferentes caracteres biológicos que tenemos los seres humanos.

¿Qué es el carácter?

Antes de empezar a hablar sobre un tema. Me gusta tener claro que se entienden los conceptos. Para ello, vamos a definir un concepto que todos creemos entender, pero que nos cuesta mucho definir. Según la RAE:

El carácter es el conjunto de cualidades o circunstancias propias de una cosa, de una persona o de una colectividad, que las distingue, por su modo de ser u obrar, de las demás.

Es una definición muy clara. Y nos viene a decir que es lo que nos hace diferentes a los demás. Aunque haya puntos en común sobre el carácter de diferentes personas, no existen dos personas iguales. El carácter nos marcará nuestra forma de actuar ante los demás y el conjunto de estas cualidades, serán las responsables de formar nuestra personalidad.

¿Se hace o se hereda?

La genética, es muy importante en la mayoría de los aspectos que tienen que ver con nuestras cualidades. Así por ejemplo influirá en el físico, en nuestra salud… Y otra de las cosas que hace, es influir en nuestro carácter. Lo que quiere decir que el carácter tiene una gran parte que ver por nuestros padres. Aunque no es lo único. Nuestro entorno, es el responsable del otro 50% de nuestro carácter. Muchas veces cuando lo pensamos, siempre solemos pensar en lo que nos han influido nuestros familiares, amigos… Y no nos damos cuenta, que eso, es tan solo una pequeña parte de nuestro entorno. Así por ejemplo, lo primero que ayudará a marcar nuestra personalidad, será nuestra situación geográfica y la cultura que se vive allí.

Así por ejemplo, podemos ver grandísimas diferencias entre niños de países diferentes. Y cuantas más diferencias culturales haya más distintos serán en carácter. Así por ejemplo, habrás oído hablar del carácter latino o anglosajón…

Pero, no solo la cultura influirá en nuestra forma de afrontar el mundo. El clima donde crezcamos, también será responsable de mucha parte de nuestra personalidad. Así por ejemplo, cuanto más Sol nos de, se dice que seremos más desinhibidos y más sociables. Podemos destacar las zonas norteñas de las del sur. Así por ejemplo, incluso dentro de España, se dice que se reconoce perfectamente una diferencia entre el carácter del norte del país con los del sur.

¿Cómo influimos?

Según hemos visto antes, el carácter de los niños se ira formando poco a poco. Aunque desde que nacemos tenemos una serie de características que tenderán a formar nuestro carácter. Aunque el entorno por si mismo, intentará modificarlas para que nos podamos adaptar al mundo que nos rodea.

Aun así, nosotros tenemos en nuestras manos el poder cambiar y ayudar a mejorar muchos rasgos importantes. Ya que aunque el resto tenga una gran fuerza, nuestra presencia y la educación que le impartamos será la verdadera clave para que el niño forje su propia personalidad.

Tenemos que tener en cuenta, que nuestra labor es que el niño aprenda a convivir y a relacionarse con sus semejantes. Ya que tiene toda una vida por delante y nosotros queremos que sufra lo menos posible. Al tener una parte hereditaria, nosotros sabemos como le irá a nuestro niño siendo de esa forma y si nos hubiera gustado a nosotros tener un carácter diferente. Con lo que si podemos ayudarle debemos hacerlo. En lo que llamamos la modificación de conducta. Así por ejemplo, si nosotros hemos sido muy tímidos y lo hemos pasado mal por esta razón. Si vemos que nuestro niño es tímido y va por el mismo camino, es el momento para ayudar a que sea más extrovertido. Es posible que nunca consigamos que sea un niño sin nada de vergüenza, pero si podemos mitigar la timidez y que no le pase lo mismo que a nosotros.

El carácter es una buena cualidad, ya que significa que el niño tiene personalidad. Aunque en algunos casos el niño deberá aprender a ceder. Ya que un exceso, lo que va a hacer es matar la empatía del niño. Debemos trabajar para suavizarlo.