Dentro del proyecto de implantación del innovador sistema de sensorización que el Ayuntamiento de Ponferrada está llevando a cabo a través de la Concejalía de Territorios Inteligentes, con tecnología de la empresa berciana Redytel, el Castillo de los Templarios y los tres museos del Ayuntamiento de Ponferrada reabriero ayer sus puertas al público incorporando una serie de sensores que mejoran la calidad y seguridad de la visita a los centros culturales por turistas y ciudadanos.
Los sensores, cuya implantación se extiende ya a 54 detectores instalados en edificios y dependencias municipales, permiten medir las concentraciones de CO2, la temperatura y la humedad relativa, así como evaluar la calidad ambiental y el nivel de ventilación en espacios cerrados. El sistema permite evitar que las altas concentraciones de CO2 puedan favorecer la propagación de virus como el COVID19. Los usuarios pueden conocer el estado del espacio en el que se encuentran los sensores, incluso antes de acceder a ellos, mediante el uso de códigos QR.
A la vez, en el contexto específico de los museos, resulta fundamental el control técnico de los parámetros de conservación ambiental y de las condiciones de exposición de las colecciones artísticas. Los detectores instalados permiten, a través de una App, un acceso gratuito, sencillo y efectivo al control de estos parámetros, información e históricos disponibles para todos los visitantes. Por otra parte, el sistema de detección de baja energía certificada, dispone de utilidades y alarmas internas ante ciertas concentraciones de CO2, que emiten una alerta temprana al Servicio de Bomberos de Ponferrada. En coordinación con el departamento de Patrimonio y Museos del Área de Cultura del Ayuntamiento, el Servicio de Bomberos y la Policía Municipal realizan servicios de control y seguridad vinculados a la protección tecnológica del Patrimonio Cultural de Ponferrada.