El cazador de la oscuridad

Publicado el 22 marzo 2016 por Aleon @Aleonpizarro
de Donato Carrisi.

Título: El cazador de la oscuridad.Autor: Donato Carrisi.Editorial: Duomo Ediciones, 2016Páginas: 477
Resumen oficial.
EN UNA ROMA MUY INQUIETANTE, UN HOMBRE INVESTIGA LOS MISTERIOS Y LOS CRÍMENES SIN RESOLVER. BUSCA LAS ANOMALÍAS PERO SOBRE TODO INTENTA DESCUBRIR SU PROPIA IDENTIDAD.
Sus investigaciones le llevan al lugar dondese custodian los pecados más abominables cometidospor la humanidad. Es el mayor archivo sobre el mal.El secreto más oculto del Vaticano.
Marcus es sacerdote y tiene un don: detecta el mal que anida en las personas. Sandra es fotógrafa de la policía. Y también tiene un don: puede hacer visible lo invisible. Ahora ambos han unido sus talentos para atrapar a un asesino abominable: alguien que sólo escoge como víctimas a parejas jóvenes.
La investigación de los crímenes les lleva al Vaticano, al archivo donde se atesoran los mayores crímenes de la humanidad. Un inventario del mal absoluto. Un lugar siniestro donde todo es oscuridad. Con un ritmo vertiginoso, Carrisi teje una historia en la que el lector libra la misma lucha que Marcus y se enfrenta a los mismos enigmas que intenta descifrar Sandra, sintiendo las mismas esperanzas y el mismo miedo hasta la última línea.
Impresión personal.
El cazador de la oscuridad es la segunda novela protagonizada por Marcus y Sandra Vega. La primera de la serie es El tribunal de las almas, una novela que no tardaré mucho en leer, aunque la que tengo en la estantería esperando es La Hipótesis del mal. Y es que después de leer esta novela, que se puede leer de forma independiente, no creo que vaya a dejar pasar por alto ninguna novela de este autor. Me ha encantado la perfecta y cerrada trama, me han encantado los personajes y me ha encantado el escenario, Roma, una ciudad de la que jamás me canso, ideal además para plantear novelas de este tipo por sus misterios, sus rincones, los que se ven y los que están totalmente escondidos en su subsuelo y llena de sectas y religiosos ¿hay algo más misterioso y oculto que los temas religiosos?
La novela cuenta con una trama muy compleja aunque aparentemente sólo tenemos un asesino que se dedica a matar parejas que se alejan del mundanal ruido en sus coches y se colocan en lugares apartados e íntimos de las afueras de la ciudad. Sin embargo, tras estos hechos se esconde toda una trama que parte de muchos años atrás, con una mezcla de religiosidad, sectarismo y esoterismo que encaja perfectamente con unos personajes tan misteriosos como la trama que investigan y la ciudad en que todo ocurre. Es una trama adictiva aunque no trepidante, pero lo cierto es que la alternancia de los capítulos entre lo que hace y piensa Sandra y lo que va sucediendo a Marcus, hace que no puedas ni quieras dejar de leer. Es de esas novelas en las que estás deseando saber, saberlo todo y que después te queda un gran vacío cuando averiguas quien o quienes anda detrás y cuales son sus motivaciones. La verdad es que me ha gustado especialmente la cantidad de sorpresas que me ha dado el autor; también algún que otro susto, todo sea dicho, pero ninguno fuera de lugar por muy inesperado que fuera.
Respecto a los personajes, Marcus y Sandra, resultan cuanto menos curiosos y diferentes a los que habitualmente encontramos en las novelas negras. Un cura invisible al mundo por lo misterioso de su relación con todo lo que lo rodea como Marcus, perteneciente a la orden de los penitenciarios, y una fotógrafa forense como Sandra, no son precisamente el tipo de personajes más habitual. Los dos están perfectamente compenetrados a pesar de estar tan distantes en sus vidas y sus profesiones. Pero entre ambos existe una confianza que no se da entre el resto de personajes. Cada uno investiga por su cuenta y de vez en cuando ponen en común las diferentes formas en que han conseguido información de tal modo que puedan seguir avanzando en la investigación del caso. En el fondo son dos personas solitarias y solas, cada uno a su manera, y es esa soledad las que los une en la distancia. Por otro lado, son dos investigadores magistrales, intuitivos y muy perceptivos, a los que nada pasa desapercibido.
Junto a ellos se mueven otros personajes, también misteriosos, que no hacen sino incrementar el misterio y la intriga del caso. Me he pasado media novela preguntándome quien es bueno y quien malo, quien leal y quien traidor y qué lugar ocupa en el puzzle.
Y finalmente, Roma, la ciudad eterna o mi eterna pasión. Una ciudad de piedras que esconden miles de tesoros y también litros de sangre derramada; donde la belleza se mezcla sin pudor con los hechos más horrendos; donde miles de religiosos (¿buenos?) se mezclan con gentes de cualquier religión e ideología; donde el ruido infernal de sus calles y plazas compite con el silencio y el recogimiento de cientos de iglesias y lugares sagrados. Por todo este entramado urbano de contradicciones nos va llevando Carrisi acompañando a sus personajes y me ha encantado visitar con él de nuevo el Trastevere, la Piazza del Popolo, la Fontana di Trevi y esas catacumbas que minan toda la ciudad. Una ciudad a la que siempre vuelvo, a la que siempre quiero volver.
No os cuento más de esta novela, salvo que tenéis que leerla. Es adictiva y tan buena como adictiva. Bien escrita, inteligentemente hilvanada y original de principio a fin.