El cerdito muere por los libros

Estos días pegando el jeto en la librería de mi universidad me quedé a cuadros. Vi dos increíbles ediciones de El señor de los Anillos y El Silmarillion de mi adorado Tolkien. De lujo, hermosas, pero valen un ojo de la cara. Por un increíble precio de (pasándolo a euros y dólares):
El señor de los anillos completo e ilustrado: 63€ (77 dólares más o menos)El Silmarillion: 45€ ( 55 dólares más o menos )
Hoy terminó la feria del libro de mi ciudad y me dio depresión y sólo fui un día a toda prisa. No tenía dinero para comprar ni el libro más baratito que me interesaba. Por eso, cuando me enteré de estos precios, volvió a mi mente un pensamiento ¿comprar un libro con una edición lujosísima pero que vale lo mismo con lo que me costeo un mes de transporte a la universidad?
En verdad es cuando me pregunto ¿debería destinar este dinero a otras cosas o debería comprarlos? Puedo decir que podría hacerlo, pero tengo que pensármelo mucho. ¿Vale la pena pagar un precio tan alto por un libro que adoras?
Naturalmente en mi país los libros son más caros. Los amigos españoles se quejan, pero si vinieran aquí verían que es muchísimo peor. Supongo que es por el costo de traerlos desde el otro lado del charco (España) y ese precio lo pagamos los lectores. Nos quejamos si, pero no hay mucho que podamos hacer. Aún en una feria que se hace anualmente y eso, la cifra de lectores sube poco. También pienso que no hacen demasiadas promociones donde podamos comprar más libros por menos precio, y eso se nota muchísimo.
Es muy doloroso quedarse con ganas de comprar un libro porque es desaforadamente caro. A veces pienso que como la cultura no es indispensable, la encarecen para que menos gente acceda a ella. Pero oye, las bibliotecas están ahí. Lo sé muy bien, porque soy usuaria de ellas, pero tener un libro en casa que te gusta mucho es mejor que cualquier cosa.
Muchos de nuestros padres o familiares nos dirían: Hay mejores cosas en que gastar el dinero. ¿En alcohol? ¿en comida? ¿o en salidas? Me parece bien en viajes y cosas que sean muy importantes. Pero muchos no entienden que para un lector, comprar libros es como desayunar.
Si en mi país y en todo latinoamérica se difundiera más la lectura y sobre todo, bajaran los precios de los libros, tal vez la gente leería más, aunque sólo es una teoría. Los que leemos y reseñamos la tenemos bien difícil. Y si me pusiera a hablar de las colaboraciones editoriales en mi país (que son nulas) y los pocos (muy pocos) bloggueros en mi país daría para otro tema muy largo. Pero sigo pensando si comprarme ésas dos bellas ediciones o no. Por el momento mejor no, que me tocaría irme caminando a la universidad. Qué cosas...