Muchos podéis decir que soy una persona que sólo sabe quejarse. Me da igual, yo doy mi opinión. Esto viene a cuento porque últimamente sólo estoy escribiendo artículos sobre cosas que no me gustan del ciclismo. El último es de Lance Armstrong.
Ahora, me gustaría hablar un poco sobre este cambio que el ciclismo está sufriendo. La verdad es que tiene bastante que ver con el artículo "¿Tanto ha cambiado el ciclismo?".
Desde mi punto de vista, un deporte como el ciclismo de competición ya no es ciclismo. Según mi opinión, ¿qué es? No hace falta demasiado pensar, sólo con leer periódicos basta, para saber que hemos pasado de practicar un deporte al que a casi todo el mundo le gustaba a un deporte al que las personas que no practican deporte lo toman como una cosa de "drogadictos" y de personas que únicamente estorban por las carreteras y calles peatonales. ¿Por qué? A lo de "drogadictos" por las inmensas noticias que salen cada día en los periódicos, y que los periodistas no saben callarse. Otra es que muchos no saben distinguir entre doping y drogas. ¿Por qué? Lo mismo no han cogido un diccionario en su vida, ¿o es que hasta los diccionarios vienen equivocados?
Lo de que molestamos en las carreteras y calles peatonales es porque las personas no están concienciadas a convivir con nosotros, puede que un poco de revote por lo anterior del doping. O que nos tienen manía, pero, sobre todo, por aquellos que van haciendo el burro por las calles, ellos sí que dan mala imagen para esto.
Y, si mezclamos ambas cosas, ¡el resultado puede ser garrafal!
Además, otra cosa, es que, cuando a un ciclista lo sancionan, ya le han fastidiado su reputación, aparte de su carrera deportiva, porque se el toma por un... No sé describirlo. Pero, desde luego que no es bueno. Esto es una cosa que me repatea mucho. ¿Sacarte tu sangre y volvértela a meter es ser "drogadicto"? Si ya lo decía Juan Carlos, sufrido "aguantador" mío y probabor de la BH Contour 6.4: "a este paso, la bebida isotónica va a ser doping" (repito, que no es lo mismo que drogarse).
En la época de Hinault, Anquetil, Merckx, Tamames, Poulidor e incluso los principios de Lejarreta o Cabestany, sólo había tres cosas para doparse (que no drogarse): Chorizo, salchichón y anfetaminas. Por lo general, se utilizaban más las anfetas, pero el chorizo y el salchichón también se utilizaban.
Es verdad que estoy contradiciendo a una frase que decía Anselmo Fuerte, ex profesional: "Con pan y chorizo no se va a esas velocidades". Digo yo que, aunque muchos no utilizarán el chorizo o el salchichón, otros muchos sí lo utilizarán.
En definitiva, hemos cogido un deporte y lo hemos destrozado entre todos. Ahora, ya no es un deporte, sino una cosa extraña...