El ciprés común

Por Plantamer @PlantaMer

Ciprés


Conocido también como ciprés mediterráneo o ciprés italiano. Su nombre científico es Cupressus sempervirens y pertenece a la familia de las Cupresáceas. Esta familia consta de unas 130 especies de varios géneros. El termino "sempervirens" significa "siempre vigoroso".
En España el género Cupressus tiene 8 especies. De ellas, el ciprés común es la más extendida, y lo reconoceremos por su silueta alargada y columnar.
Su origen se encuentra en el mediterráneo oriental (hasta Irán) y se introdujo en Italia en la antigüedad, desde donde se ha extendido a toda la región mediterránea. En España está en toda su geografía, principalmente cultivada en parques, cementerios, etc.
Los cipreses son árboles longevos. Son monoicos (con flores masculinas y femeninas separadas pero presentes en el mismo árbol).
Florecen en primavera y sus flores masculinas son fáciles de distinguir por su color amarillo. Sus frutos son pequeñas piñas (conos) casi esféricas y suaves que se abren al madurar liberando pequeñas semillas aladas.

Rama de ciprés con sus piñones


Sus hojas tienen forma de escama y están imbricadas, superpuestas unas a otras.
Necesitan mucho sol y son resistentes a las sequías, por lo que no hay que regarlos mucho. Toleran casi cualquier tipo de suelo. Lo que no toleran son las bajas temperaturas.
Reproducción:
Se reproducen por semillas. Si recogemos una piña (grande y oscura), al secarse se abrirá dejando caer las semillas. Si ponemos esas semillas en una maceta y las regamos podrán germinar.
De sus hojas se extrae un aceite utilizado en farmacia.
Cómo curiosidad indicar que los fenicios utilizaron su madera para construir sus barcos.