"El Circo de Cantora". Pasen y vean

Publicado el 10 noviembre 2013 por Sergio Ampuero Mata @SergioMata_86
¡Pobre MiPanto! La mujer no gana para disgustos. Si Isabel contrata a Chiqui para montarse un circo en Cantora, la ex gran hermana se convierte en la réplica femenina de Pau Gasol. Si alguien se cruza con la tonadillera, por favor, se ruega que cambie de acera lo antes posible para evitar males mayores. A los supersticiosos acérrimos ya no les importan los espejos rotos, los gatos negros y pasar bajo los andamios; lo que de verdad ahora les preocupa es que la Pantoja no les eché mal de ojo, pues aún no se ha hallado remedio casero conocido para los desastres de categoría bíblica que se pueden venir encima.
O la maldición gitana de Lola Flores surgió efecto (el famoso "Llorarás el resto de tu vida lo que le estas haciendo llorar a mi hija y nunca serás feliz con un hombre" cuando Isabel le "robó" a Paquirri) o la folclórica debería hacérselo mirar. De viuda de España a condenada por blanqueo de capitales, y la cosa suma y sigue. A la cruenta guerra que vive su hijo Kiko por la custodia del pequeño Francisquito con Jessica Bueno (que de momento se salda con la justa victoria de Paquirrín al conseguir la custodia compartida y el rechazo de las pruebas toxicológicas que la modelo ha pedido al DJ), se acaba de sumar ahora la joya de la corona, el perejil de todas las salas, la reina madre de los escándalos familiares televisados: Su hija pequeña, Chavelita, tiene un bombo cual huevo de avestruz con tan sólo 17 años y el padre de la futura criatura, Alberto Isla, cuenta con un pasado con más agujeros negros que los que ha visto Nacho Vidal en toda su carrera cinematográfica. Aunque la noticia se conocía desde hace meses (por obra y gracia del maestro -ejem, ejem- del periodismo contrastado Kiko Hernández), no podía detallarse su contenido pues Isabel II, estaba amparada por la ley del menor. Ahora, además de conocer que la Pantoja nos mentía vilmente cuando cantaba aquello de "Qué bonita que es mi niña", la veda queda abierta. Así que la cantante, que es muy suya para eso de las exclusivas, quiso evitar que las cadenas se lucrasen con el asunto y lanzó el siguiente comunicado a las 00:00 del día que su pequeña del alma encendía 18 velitas en la tarta y un cirio en la cueva del amor:
A pesar de las amenazas encubiertas del comunicado, esto ya no hay quien lo pare. Con los programas dedicados en cuerpo y alma a destripar famosos haciendo caja por obra y feto de Chavelita y las redes sociales ardiendo con crueles -a la par que desternillantes- bromas sobre el asunto, la hija de la Panto aspira a convertirse en  la Nueva Reina de Corazones. Incluso se rumorea que la madre ya está preparando su regreso a los pasillos de Telecinco del brazo de su hija para evitar un desmedido acoso y derribo contra la joven.Porque la familia está encantada. ¿Quién duda de que a Isabel le ha cautivado la idea de que que su bella Isabelita Jr. haya venido con un Kinder Sorpresa cuando aún no cuenta con 18 años?, ¿acaso alguien cree que a la Panto no se emociona sólo de pensar que su pequeña se abra en dos como un compás para beneficiarse a un muchacho de dudosa reputación?, ¿no es lógico que la Reina de la Copla se muestre orgullosa y alegre de que la criatura se haya saltado las clases de sexualidad en el colegio y se haya embarazado en un abrir y cerrar de chichi?, ¿habrá quien piense que Pantoja necesita clases de lengua para primerizos y repasar los significados de las palabras "estable", "duradera", "consciente" y "deseado"? Está clarísimo que la gran Isabel y toda la prole (Kiko, Anabel & CIA ya han manifestado en las redes sociales su alegría por la buena nueva) les llena de orgullo y satisfacción que Chavelita tenga en las gallinas su modelo a seguir en lo que a procreación se refiere.No contenta con preñarse, la muchacha se ha buscado a un futuro padre que va soltando espermatozoides como quien se toma un cup of cafe con leche. El novio de la zagala pone de manifiesto aquello de que "el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra" o es alérgico al látex.´El señorito´, aspirante a torero, fue padre de un niño cuando tenía 17 años junto a una joven sevillana que, casualidades de la vida, mostró los pormenores de su embarazo adolescente a una Samanta Villar con una visión de futuro que para sí quisiera Sandro Rey (entrevistar con dos años de adelanto a la madre del futuro hermano del nieto de Pantoja es una hazaña periodística sin parangón). Pero el chaval ha hecho un "si aquí lo eché ya ni me acuerdo" y ha pasado de la educación del bebé como de depilarse el escroto con cera caliente. Además, Alberto Isla no tiene oficio ni beneficio conocidos y lo de estudiar tampoco va con él. Vaya, todo un ejemplar. Pero todo esto sólo es la punta del iceberg. Isabel se toma tan en serio sus canciones que lleva 57 años cual mártir protagonista de sus coplas: La artista enviudó con tan sólo 28 años de su "Marinero de luces" tras años siendo ´la otra´. Tras su regreso a los escenarios, ríos de rumores alimentaron los años dorados de la prensa del corazón con los presuntos romances de MiPanto con José Coronado y las crecientes especulaciones que relacionaban a la tonadillera con féminas como Encarna Sánchez (que tenía la empanadilla demasiado caliente) o María del Monte (por cierto, madrina de la precoz Isabelita Jr). La llegada a Cantora de Chavelita tampoco estuvo exenta de polémica ya que se aseguró que Isabel había tuvo trato de favor en la adopción en Perú de la pequeña por parte del presidente Fujimori, aunque al final no se demostró que hubiera irregularidades en el proceso. Las aguas se calmaron y Diego Gómez trajo paz a la vida de Isabel y un restaurante pelín ruinoso, pero todo cambio cuando el alcalde marbellí Julián Muñoz se cruzó en su vida. El resto ya es de sobra conocido por todos: infidelidades, corrupción, muchos dientes (que es lo que les jode), calabozos, juicios mediáticos y una condena a dos años por blanqueo de capitales que terminaron de encumbrar a Isabel Pantoja como el referente de la Wikipedia en lo que al mal fario se refiere.Échale paciencia Panto, que no hay mal que cien años dure...
Por Sergio Mata